En el marco del 80 aniversario de la compañía y en referencia al recorrido histórico en el que se han centrado para su celebración, José Bogas, CEO de Endesa, nos explica: «Tenemos un gran futuro por delante y volver por un momento a nuestros orígenes nos refuerza en el convencimiento que nos sigue guiando: ser una empresa clave para el desarrollo de España, servir a nuestros clientes y al conjunto de la sociedad, y mantener los vínculos con los lugares que nos han visto nacer y que han sido fundamentales para ser lo que somos hoy».
Los primeros años, 1944-1950
Después de su constitución, y para resolver los graves problemas de restricción eléctrica que sufría España en la década de los cuarenta, el Instituto Nacional de Industria (INI) decidió solventar los desequilibrios entre producción y consumo incrementando la generación eléctrica de origen térmico. Con este objetivo, el INI diseñó un plan de actuación que proyectaba construir una importante Central Térmica en Ponferrada. Con la ejecución de este proyecto, se constituyó una Sociedad llamada Empresa Nacional de Electricidad, S.A. (Endesa), el 18 de noviembre de 1944.
A la construcción de la Central Térmica de Compostilla, en Ponferrada, en 1945, le siguieron cuatro años de trabajo hasta que se pusiera en marcha el primer Grupo de la Central que se conectó a través de una línea de 220 KV, con la Subestación de La Mudarra, en Valladolid. En vista de que la producción de origen térmico no era suficiente para satisfacer una creciente demanda energética, Endesa decidió afrontar dos nuevas líneas de actuación: la construcción de saltos hidráulicos en la zona leonesa del Bierzo y la instalación de centrales móviles. El INI, siguiendo con una política que permitiera resolver la falta de energía eléctrica, constituyó la Empresa Nacional Hidroeléctrica del Ribagorzana, S.A. (Enher) con el objetivo de realizar un aprovechamiento integral del río Noguera Ribagorzana.
La consolidación, 1950–1970
A partir de 1950, el sistema de transporte y distribución de electricidad se reforzó estableciéndose la interconexión de la zona Noroeste con la zona Centro a través del Parque de Alta Tensión de Compostilla. En este periodo, Endesa instaló tres centrales hidroeléctricas en el río Sil; y, con la intención de incrementar la potencia instalada en el parque de generación termoeléctrica, puso en marcha en 1954 la CT de Huelva; posteriormente, en 1961, la CT Compostilla II.
La expansión, 1970-1983
De 1970 a 1980, Endesa incrementó sustancialmente su dimensión empresarial fusionándose con sociedades productoras y distribuidoras de electricidad, adquiriendo activos eléctricos de otras compañías y reforzando su parque de generación con importantes centrales termoeléctricas.
Con la adquisición de importantes complejos mineros, la compañía proyectó la construcción de dos centrales térmicas a boca de mina: la CT de As Pontes (1976), llegando a ser la mayor de España con 1400 MW, y la CT de Andorra (1979) con 1050 MW.
Imagen de la construcción de la central Alcúdia I. Foto: FONDO HISTÓRICO ENDESA
Endesa adquiere GESA, 1983 - 2001
En 1980 Endesa contaba con una magnífica situación financiera, lo que le permitió reordenar su grupo empresarial y adquirir las participaciones del INI sobre empresas eléctricas como Enher, Gesa o Unelco. Del mismo modo, en este período, entró como pieza fundamental en el accionariado de Fecsa, la compañía heredera de la Barcelona Traction y la SEE, y un claro referente en el mercado energético del noreste de la península ibérica. A partir de allí, Endesa encaminó sus actuaciones al respeto medioambiental, entre ellas: el lavado de carbón con el que se conseguía reducir el contenido de azufre; la depuración de las aguas residuales de los vertidos de las minas; nuevas técnicas de combustión térmica o el impulso a las energías alternativas. En 1987, inauguró dos parques eólicos en Zaragoza y en Galicia, y dos centrales hidroeléctricas: La Remolina en 1990 y Rioscuro en 1992.
Todo ello, bajo la tutela de Feliciano Fuster, quien fuera presidente de la compañía desde 1984 hasta 1997. A finales de la década de los noventa y con la Sociedad totalmente privatizada desde 1998, Endesa decidió optar en 1999 por la fusión de sus sociedades filiales participadas: Fecsa, ERZ, Sevillana, Gesa, Unelco y Viesgo, convirtiéndose en el referente energético español.
Los años recientes, 2000-2024
En la primera década del siglo y con la mejor calificación entre las empresas del sector, es seleccionada para incorporarse al índice Dow Jones Sustainability World Index, que agrupa a 300 empresas líderes de 23 países que destacan por su aplicación de los criterios de desarrollo sostenible. Al mismo tiempo, renueva su presencia en el Dow Jones Stoxx Sustainability Index europeo. A partir de 2005, se suceden una serie de movimientos clave en el capital de Endesa, y tras varias ofertas públicas de adquisición de acciones, Enel se convierte en su principal accionista.
En la actualidad, es la empresa líder en el sector eléctrico español y el segundo operador del mercado eléctrico en Portugal. Cuenta con más de nueve mil empleados y presta servicio a más de doce millones de clientes. Es una empresa referente en la Transición Energética que avanza hacia un modelo descarbonizado, invirtiendo en energías renovables y en la digitalización de su red de distribución, manteniendo siempre el foco en mejorar la eficiencia del servicio a los clientes.