Si bien el cáncer es una de las enfermedades en las que más se investiga hay que tener en cuenta que España es uno de los países de la Unión Europea con menor porcentaje de recursos dedicados a la investigacióny al desarrollo. Así lo señala el presidente de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) en Baleares, José Reyes, con motivo del Día Mundial de la Investigación en Cáncer. «Por eso hay que difundir su importancia entre la sociedad porque cuanto más conscientes seamos de su beneficio, mejor se podrá reclamar financiación para estos proyectos», ha asegurado este martes en un acto de visibilidad en la calle Sant Miquel de Palma.
Si las cifras a nivel nacional ya son comprometidas, la inversión pública en investigación en Baleares está por debajo de la media española pese a que sólo en 2023 se diagnosticaron 6,297 nuevos casos. «Por eso es un objetivo prioritario para la AECC. A nivel nacional somos la entidad privada que más dinero destina a la investigación del cáncer con 114 millones de euros y en las Islas fueron 550 mil euros en 2023».
Explica el doctor Reyes que los dos tipos de cáncer con más avances en los últimos años han sido el de colon y el de mama «a través de la mejoría de los mecanismos de diagnóstico precoz y de tratamiento de la enfermedad, pero en realidad todos los tumores se benefician de la investigación y ha habido enormes avances en todos». También es cierto que en los conocidos como tumores de supervivencia estancada, como podrían ser el de páncreas o esófago, «ahora se hace un especial esfuerzo para revertir esta situación».
La inmunoterapia y las Car-T para los tumores hematológicos son probablemente los tratamientos más impactantes de los últimos años, pero «para las enfermedades como una carcinomatosis peritoneal avanzada, por ejemplo, se hacen tratamientos de quimioterapia intraperitoneal que han mejorado claramente la supervivencia».
Las líneas de avance en estos momentos son muy amplias en diferentes ámbitos por este motivo, añade el doctor Reyes es importante «dar apoyo a los investigadores», sobre todo «sin perder de vista la investigación básica». Estos proyectos nacen en los laboratorios y sientan las bases de lo que posteriormente se llevará a cabo a nivel asistencial. «Son las que tienen más dificultades para ser financiadas y las que tienen más capacidad para modificar los tratamientos futuros», subraya este especialista.