Los problemas de congestión vial que sufre Mallorca están dilatando la duración de los recorridos del sector del transporte de mercancías. En el caso de algunas de las rutas más largas -que abarcarían de Palma a determinados puntos de la costa norte o del Llevant- éstas pueden llegar a duplicar el tiempo total empleado por los conductores.
Así lo afirma el presidente de la Agrupación Mercancías de Balears y vicepresidente de la FEBT, Ezequiel Horrach, quien explica que el problema de la saturación en carreteras se ha sumado como nuevo factor de estrés a unas plantillas de conductores especialmente cortas por la falta de profesionales disponibles.
«No es fácil, se ha convertido en un verdadero problema sobre todo a partir de mayo y junio, cuando empieza a haber cada vez más tráfico hacia las zonas de costa», asevera Horrach.
Todo ello se traduce, asegura, en jornadas más largas para los conductores. Es muy habitual, de hecho, que los profesionales deban anticipar el inicio de sus salidas y, con ello, el de su jornada laboral. «Nos preocupan los conductores más jóvenes, que van estresados durante todo el día y ahora encima tienen que empezar antes», señala Horrach.
La preocupación cobra mayores dimensiones teniendo en cuenta un problema de falta de personal que se está cronificando, según las patronales del transporte y que motiva que la edad media de los conductores sea cada vez más elevada. En este contexto, se teme que condiciones laborales como las que se están dando contribuyan todavía más a ahuyentar las posibilidades de un relevo generacional que no acaba de llegar.
Otro efecto secundario son los retrasos acumulados en las entregas de las mercancías, en especial a empresas del sector turístico localizadas en estos puntos del litoral mallorquín. Retrasos que, por otro lado, se vieron incrementados con el incendio del ferry Tenacia de GNV hace dos semanas.
Asimismo, la cuestión de los accesos a Palma se ha vuelto especialmente problemática: los camiones lo tienen cada vez más difícil para llegar al puerto para embarcar en los ferris, con las consiguientes quejas de las navieras.
Así lo aseguran desde la Federación Empresarial Balear del Transporte (FEBT), cuyo presidente, Rafael Roig, explica que en el caso del transporte discrecional están manejando como buenamente pueden esta situación, la cual, en todo caso, muestra su peor cara en las horas punta de los días laborales. En cualquier caso, exime al sector del rent a car de tener que cargar con toda la responsabilidad de las congestiones cuando se superan el millón de vehículos en el Archipiélago, con una media de prácticamente un coche por habitante.
Desde el Fòrum de la Societat Civil (FSC) se han lanzado ya varias propuestas para hacer frente a la masificación turística enfocadas en medidas de descongestión vial como, por ejemplo, que de abril a septiembre la flota de coches de alquiler en Mallorca tenga un límite de 25.000 unidades. Una cifra muy inferior a los cerca de 100.000 coches de alquiler que actualmente ruedan por las carreteras de las Islas en su conjunto (aunque la inmensa mayoría se concentre en Mallorca).
Los problemas de congestión vial serán algunas de las cuestiones clave que tratarán los representantes del sector del transporte con el Govern el próximo martes 23, fecha en la que se celebrará la primera reunión del grupo de trabajo sobre movilidad de la Mesa del Pacto por la Sostenibilidad de Balears. Dicho grupo de trabajo -uno de los doce configurados por el coordinador del grupo de expertos del Pacto, Antoni Riera- será supervisado por la directora general de Mobilitat del Govern, Lorena del Valle.