La portavoz de Vox en el Parlament balear, Manuela Cañadas, ha afirmado este miércoles que la actitud que mostró este martes el presidente de la Cámara legislativa, Gabriel Le Senne, «no es aceptable», pero ni es una «agresión, ni violencia», como mantienen los partidos de la oposición.
En rueda de prensa, Cañadas ha explicado a los periodistas que ella misma advirtió a Le Senne sobre su comportamiento propiciado, según ha explicado, por la actitud «provocadora nata» pleno tras pleno de la diputada socialista y miembro de la Mesa Mercedes Garrido.
Cañadas ha criticado la «performance» que montó este martes el PSOE en el Parlament y que la propia Garrido, una vez expulsada, estuviera «riéndose» con otra diputada y diciendo a un fotógrafo: «tienes el vídeo, tienes el vídeo».
«Lo que buscaban realmente lo han conseguido», ha añadido Cañadas, que ha dejado claro que su partido «no compra los discursos de la izquierda, ni tiene ningún complejo o miedo». La portavoz ha recordado que Le Senne llamó hasta tres veces al orden a las dos diputadas expulsadas, que hicieron caso omiso de su «obligación» de mantener la neutralidad de la Mesa del Parlament.