La aerolínea irlandesa Ryanair va a incrementar su operativa en Baleares este verano. El nivel de demanda, superior a las de 2023, está sentando las bases para un crecimiento logístico que se traducirá en cuatro nuevas rutas (tres en Mallorca -Exeter, Londres y Zagreb- y otra en Ibiza -Oporto-), 30 nuevos puestos de trabajo y un nuevo avión con base en Ibiza.
Por lo que respecta al volumen de pasajeros, todo ello se traducirá en un crecimiento del 9 % en Mallorca (7,2 millones de pasajeros), del 13 % en Ibiza (2,2 millones) y del 24 % en Menorca (900.000). En total, se trata de 10,3 millones de pasajeros en el conjunto de las Islas.
De esta manera, las cifras globales de la compañía en el Archipiélago alcanzarán las 139 rutas, 17 aviones con base que equivalen a 1.700 millones de euros de inversión y un total de 8.200 puestos de trabajo. Para celebrar las cuatro nuevas conexiones, Ryanair ha lanzado una oferta de billetes desde 21,99 euros que mantendrá durante los próximos tres días.
«El aumento de inversión y del tráfico ponen de manifiesto el compromiso de Ryanair con el crecimiento turístico y la conectividad de la región», señala la Country Manager de la compañía aérea en España, Elena Cabrera para añadir que las estimaciones son de que «todavía hay espacio para seguir creciendo».
Ese crecimiento, detalla, debe diversificarse a lo largo del año como medida para combatir la sensación de saturación que padecen residentes y turistas. «Sé que es algo que ha aumentado en los últimos años y lo entiendo a la perfección porque yo misma soy canaria». La apuesta, por tanto (y esa es una línea de trabajo definida como estratégica por Cabrera) pasa por «abrirnos a crecer en temporada baja: se puede crecer también en invierno, que son meses en los que, de todos modos, no se está experimentando una gran caída».
Las previsiones de crecimiento de Ryanair, con 200 millones de pasajeros a nivel global, no se detienen en Baleaers, asegura Cabrera: el objetivo es llegar a los 300 millones en 2035. Para ello, aseguran, se servirán del mantenimiento de la competitividad, entre otras cosas, por la contención en el precio de los billetes en los últimos años gracias a haber cerrado el precio del barril (a 65 dólares el barril después de la pandemia, a 89 dólares ahora) antes de la estratosférica subida del combustible.
Por otro lado, Cabrera se muestra de acuerdo con Steve Heapy acerca de la necesidad de «tener cuidado» con el mensaje sobre la priorización del turismo de calidad en Balears. El CEO de Jet2Holidays advirtió que se corría el riesgo de trasladar la idea de que «solo se buscan turistas ricos» al identificar calidad con un poder adquisitivo elevado. En opinión de Cabrera, «hay que pulir este mensaje porque es un poco erróneo», señala para señalar que «existe una percepción sobre este tema que no se corresponde con la realidad». Asimismo, reivindica que su aerolínea «ha apostado siempre por democratizar los vuelos» reduciendo el precio de los billetes para poder gastar más en destino.