«Que el PP no quiera hacer una auditoría externa sobre la exconsellera insular d'Hisenda, Pilar Bonet, los hace sospechosos de querer esconder algo y, por eso, registramos una batería de preguntas para saber los gastos personales, las dietas, los viajes y qué negoció durante el tiempo que estuvo en el cargo». Así de contundente se ha mostrado el portavoz de Més en el Consell de Mallorca, Jaume Alzamora, que junto a la representante del PSIB, Catalina Cladera, han anunciado que tras el pleno de lunes sobre el presunto desfalco de Bonet que tienen «más dudas que certezas».
«El presidente Llorenç Galmés no aclaró nada que no supiéramos por los medios de comunicación, lo de ayer fue una cortina de humo», ha dicho la socialista, que lamenta que esta situación genere sospechas sobre corrupción en el Consell, algo que el presidente negó. «Galmés es el responsable, y mintió porque hasta que no salió en los medios no supimos la verdad sobre el motivo de la dimisión de Bonet, que inicialmente alegó motivos personales», ha recordado Cladera.
Més y el PSIB quieren saberlo todo sobre el paso de Bonet por la institución insular, pero también en sus años como regidora de Hacienda en el Ajuntament de Llucmajor, donde compaginó su cargo político con el de jefa de contabilidad de Globalia, donde presuntamente habría cometido el desfalco millonario.
Alzamora y Cladera han señalado que quieren saber con quien se reunió siendo consellera, pero también si negoció directamente con la concesionaria que gestiona los residuos, Tirme, porque «por primera vez el Consell ha inyectado 43 millones de euros a esta empresa, algo que ahora, tras lo sucedido, nos genera más dudas», según Cladera.
El PP acusa a la oposición de «estirar el chicle»
La portavoz 'popular' en el Consell, Núria Riera, ha criticado que la oposición trate de «estirar el chicle» por el caso Bonet, reprochándoles que las insinuaciones sobre posible corrupción en la institución «hacen daño» a los técnicos insulares.
Frente a las críticas sobre el pleno, Riera ha asegurado que las actuaciones y comparecencias durante estos días del presidente del Consell han sido una «muestra de transparencia» y de «buena política». Así, ha destacado que en 72 horas se produjo el cese inmediato de Bonet y la convocatoria de un pleno extraordinario en el que el presidenta insular «dio todos los detalles».