El sector textil ha sido el gran baluarte del pequeño comercio en esta Semana Santa. El buen funcionamiento que durante el periodo festivo ha tenido el sector en general y el de la moda en particular han llevado a superar las ventas de 2019 y, en muchos casos, incluso a duplicarlas.
Ese es el balance de la agrupación sectorial PIMEM-Comerç, cuyo presidente Miquel Àngel Mateu, asegura que entre sus asociados hay una satisfacción generalizada por la gran afluencia de clientes tanto en Palma como en la Part Forana.
«Aunque la sensación no era la del verano, se ha notado mucho la afluencia de visitantes y esto se ha traducido en unas ventas que en según qué establecimientos se han doblado respecto a las de 2019», señala Mateu para añadir que, a pesar de que todavía había una parte de la planta hotelera cerrada (la apertura se ha aproximado al 80 %), los establecimientos comerciales de las zonas turísticas que decidieron abrir han podido aprovechar el «gran movimiento» tanto de clientes locales como de visitantes de estos últimos días para cerrar «unas buenas ventas».
Por lo que respecta a Palma, el centro fue la zona que más se benefició de este trasiego, con Sant Miquel, Oms, Jaume III y Jaume II como las calles con una mayor afluencia de consumidores. El sábado, concretamente, «fue un día de locura en cuanto a ventas».
En cuanto a la Part Forana, el balance es similar, especialmente según lo transmitido por los socios de PIMEM-Comerç que operan en zonas turísticas como Alcúdia, Port d'Alcúdia, Can Picafort o Cala Rajada, los cuales aseguran que han tenido «mucho trabajo».