El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, fue uno de los invitados a la Gala del Empresario 2022 de la CAEB y aprovechó su presencia en el acto para reivindicar el papel «fundamental» que las empresas deben jugar para salvar la crisis actual y la incertidumbre que se cierne sobre el año próximo, un papel que para ser eficiente, avisó, debe contar con el apoyo de las administraciones públicas. Garamendi hizo referencia asimismo a lo que calificó como «juego demagógico» en el que están cayendo sectores sindicales y gubernamentales en la cuestión del debate salarial. «Como hay gente que está en campaña política se dicen muchas cosas, pero la realidad es que la negociación colectiva está funcionando».
El presidente de la CEOE insistió en que «lo realmente importante son los convenios colectivos». Así, recalcó que «hace poco se ha firmado el convenio de la construcción que afecta a 1,5 millones de personas, en el sector del metal y otros... Nadie está diciendo que no se suban salarios, pero sí, y lo dice el propio Banco de España, que no se puede indexar los salarios a la inflación; los beneficios del año pasado fueron de 100.000 millones menos, y este año son ya de 7.000 millones menos». Por último, Garamendi señaló que «querer culpar al mundo empresarial de la situación tiene su aquel, cuando el Estado está recaudando mucho más gracias a la inflación».
Por su parte, la presidenta de la CAEB, Carmen Planas, coincidió con Garamendi es que las empresas todavía no han recuperado el estado de salud del que gozaban en 2019. «Ejemplo de nuestro empuje y capacidad de resiliencia han sido los dos duros años de pandemia que hemos dejado atrás hace unos meses. Dos ejercicios, los de 2020 y 2021, extremadamente duros, cuyas consecuencias aún arrastramos, pero que han dado paso, por fin, a un 2022 en el que hemos recuperado la normalidad». «Reclamamos unas reglas del juego bien definidas, que no nos las cambien sobre la marcha. Necesitamos lealtad desde la Administración, seguridad jurídica y certidumbre para la transformación que queremos», sentenció.
El REB
De cara al futuro, Planas insistió en que «nuestro modelo económico es fuerte y también innegociable, pero requiere de una profunda revisión porque estamos ante una transformación acelerada por la pandemia». Por otra parte, entre las «herramientas imprescindibles» reclamadas está la parte fiscal del Régimen Especial de Balears (REB), «que afortunadamente ya figuran en el proyecto de Presupuestos Generales van a ser muy importantes para paliar las desventajas de las empresas por el hecho insular y van a fomentar las inversiones productivas». Un REB que «se aprobó para que sea permanente, no temporal», por lo que desde CAEB piden que vaya más allá de 2028.