Mallorca se enfrenta a su ola de calor más larga desde que hay registros. Este lunes la isla cumplió su sexto día inmersa en un periodo de temperaturas inusualmente altas y las previsiones de cara a este semana no son buenas. Los pronósticos no prevén un descenso de temperaturas hasta la próxima semana. Hasta ahora las olas de calor más largas registradas en la Isla habían acaecido entre el 29 de julio y el 3 de agosto de 2017 y la registrada entre 27 de julio y el uno de agosto de 2020, ambas de seis días de duración. Con tales datos, batiremos récord este martes, cuando se cumplirá el séptimo día consecutivo de una ola de calor que se inició el pasado miércoles, 13 de julio.
Según las previsiones que maneja la Aemet de las Islas Baleares, los pronósticos no son halagüeños. «Seguiremos toda la semana con avisos por altas temperaturas, que rondarán de máxima entre los 36ºC y los 38ºC -cuya sensación se verá acrecentada por la humedad-. El jueves y el viernes puede producirse un ligero descenso, pero no será significativo. El sábado y el domingo volverán a subir los termómetros, con máximas todavía más altas», explica Miquel Gili, portavoz adjunto de Aemet Baleares. Este fenómeno provocará que aumente el peligro de incendios forestales y se caliente la temperatura del mar. Las noches tampoco supondrán un respiro. Para lo que resta de semana se prevén, ya no solo noches tropicales, sino las llamadas «noches tórridas», con temperaturas mínimas de 25ºC, como en Capdepera, donde la pasada noche no han bajado de los 26,1ºC.
Mallorca nunca se había enfrentado a un periodo tan extenso con temperaturas inusualmente altas, con entre cinco y seis grados por encima de lo habitual. Esta ola, según explican desde la Aemet, se caracteriza no por temperaturas de récord -pues no se han superado los 40ºC-, sino por su extensión, ya que probablemente la isla supere los diez días de calor sofocante. «Hace años estos fenómenos ocurrían muy de vez en cuando y no por costumbre cada año, como estamos viendo últimamente», apunta Gili. Habrá que prepararse, porque de cara al futuro estos episodios, según el meteorólogo, serán más frecuentes y duraderos.
En el resto de la Península, por contra, los pronósticos señalan que este mismo lunes entrará una masa de aire fresco que bajará los termómetros de forma considerable, finalizando la ola de calor que dio comienzo allí el lunes 10 de julio. «En Mallorca esto no nos afectará y seguiremos con una masa de aire estancado encima», aclara el portavoz mallorquín, que seguirá calentándose y dificultando la vida diaria y el descanso de los residentes.