El 70 % de las personas atendidas por Cáritas Mallorca en el año 2021, siete de cada diez, eran migrantes, y un 37,5 % de ellas se encontraba en situación irregular en España, un factor de «exclusión y mayor vulnerabilidad». Esta situación supone un «grave problema» para que puedan encontrar un trabajo legal, por lo que la mayoría se emplea en la economía sumergida y, por tanto, de mayor precariedad, según recoge la Memoria 2021 de Cáritas Mallorca.
En 2021, esta entidad social de la Iglesia católica atendió en Mallorca a 9.249 personas, lo que supone una disminución del número de personas necesitadas del 18 % respecto a 2020, un ejercicio especial al tratarse del segundo año de la pandemia de la COVID-19.
De las personas atendidas el año pasado, el 31 % pedían ayuda en Cáritas por primera vez, mientras que el resto ya habían sido atendidas en otras ocasiones, según señala esta memoria presentada este miércoles por el obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull.