Un estudio de la Universitat de les Illes Balears (UIB) sobre el consumo de agua durante el primer confinamiento de la pandemia ha revelado que el turismo consume en las Islas el 24,2 por ciento de los recursos hídricos, unos 33 millones de metros cúbicos al año. El estudio, elaborado por los doctores Celso García y Enrique Morán, calculó la reducción del consumo de agua durante la fase de restricciones de la movilidad en 2020, entre abril y junio, para conocer el volumen de agua empleada por la actividad turística.
Los investigadores han desvelado también las diferencias que arrojan los resultados por municipios en función de la importancia del turismo. De este modo, mientras Muro (Mallorca) mostró un descenso del consumo de hasta el 70 por ciento, la caída del consumo en Palma, con importante peso de la población residente, el consumo se redujo un 16 por ciento durante el confinamiento. Por otra parte, los investigadores han lamentado que las medidas de ahorro de agua contenidas en la ley turística aprobada este martes en el Parlament «llegan tarde» y que, además, algunas ya se están aplicando en los hoteles desde hace 25 o 30 años, como los dobles pulsadores.
Según los expertos, «habrá que esperar a ver el impacto real sobre el ahorro». En la misma línea, han reclamado medidas más ambiciosas como una verdadera apuesta por el empleo de aguas regeneradas. «Las depuradoras son las grandes olvidadas. Si utilizas agua con otros usos no tendrás que emplear agua subterránea y los acuíferos podrán regenerarse», han añadido.