Palma tampoco tendrá fiestas de barrio este verano. En estos momentos los festejos populares están suspendidos por el Govern balear, con motivo de las restricciones aplicadas ante la pandemia del coronavirus. Pero aún cuando esta prohibición se levantase, desde el Ayuntamiento de Palma se estudiaría la viabilidad de organizar este tipo de actos festivos por parte de las asociaciones o entidades vecinales durante los dos próximos meses.
El concejal de Participació Ciutadana i Govern Interior, Alberto Jarabo, explica que «el Ejecutivo autonómico informó a la FELIB de que se podrían permitir según qué tipo de eventos, pero, por lo que yo sé, hasta ahora esto no está nada concretado e iremos viendo cómo evoluciona».
«La situación en las próximas semanas no va a cambiar y hoy por hoy no se pueden solicitar permisos para organizar festejos», afirma el edil.
Jarabo admite que «algunas asociaciones se han puesto en contacto con nosotros, y les estamos transmitiendo que, de momento, no se pueden celebrar estas fiestas populares. A partir de septiembre entendemos que sí se podrá, pues ya habremos llegado a un punto de suficiente seguridad sanitaria. Pero aún en caso de que se celebren en septiembre será con unas condiciones y unas restricciones importantes».
«No pensemos que esto de la nueva normalidad va a llegar pasado mañana –aclara Jarabo–, habrá gente que la intente ejercer, pero la verdad es que nosotros con todas las entidades vecinales que hemos hablado nos han hecho saber su responsabilidad y que prefieren no arriesgarse».
Explica que las entidades están presentando solicitudes de permiso para otro tipo de proyectos, «más que fiestas intentan fomentar encuentros, formaciones... actividades que les permiten ir haciendo gastos para cubrir los anticipos que se les han dado».
Las solicitudes de permiso para una fiesta se deben presentar al Consistorio entre tres y cuatro semanas de antelación, por lo que el regidor insiste que «no veo» que este verano puede haber fiestas de barrio en Palma.