La posibilidad de indultar a los políticos catalanes condenados por el procés reabre el debate sobre esta medida de gracia, con 150 años de historia. Sin embargo, estos no serán los primeros ni los últimos indultados en generar ruido. La historia de España cuenta con una larga lista de indultados, cuanto menos polémicos, que incluye a políticos, banqueros, militares y policías.
Estos son algunos de ellos:
Los dos indultos de Jesús Gil y Gil
Francisco Franco indultó al empresario Jesús Gil y Gil tras ser condenado a cinco años de prisión por un delito de homicidio involuntario por la muerte de 58 personas en el restaurante Los Ángeles de San Rafael (Segovia). Promotor y propietario del complejo turístico donde estaba ubicado el establecimiento, Gil empezó las obras de ampliación sin tener licencia y mandó adelantar la inauguración, cuando se produjo la tragedia. Solo cumplió dos años.
En 1994 llegó el segundo indulto para el que fuera presidente del Atlético de Madrid. Esta vez, el Gobierno del PSOE, le concedió esta medida de gracia pese a estar condenado por estafa.
Alfonso Armada y el 23-F
En diciembre de 1998, el PSOE, entonces al frente del Ejecutivo, concedió el indulto a Alfonso Armada, un militar condenado a 26 años de cárcel por el intento de golpe militar del 23 de febrero de 1981. Se convertía así en el primer golpista condenado al que se le concedía esta medida de gracia, que había llegado a solicitar hasta en cinco ocasiones.
José Barrionuevo, Rafael Vera y el GAL
Uno de los indultos más sonados fue el que recibieron el exministro de Interior del PSOE, José Barrionuevo, y el ex secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, en diciembre de 1998. Barrionuevo, Vera y ocho cargos más fueron condenados por el secuestro del ciudadano francés Segundo Marey, confundiéndole con un dirigente de la banda terrorista ETA –en la primera acción reivindicada por los GAL–.
Barrionuevo y Vera fueron condenados a diez años de prisión, una pena que el Ejecutivo de José María Aznar redujo en dos tercios, junto al tercer grado penitenciario, para que pudieran salir de la cárcel. Quedaron al margen del indulto los expolicías José Amedo y Michel Domínguez.
Gómez de Liaño
El ex magistrado Javier Gómez de Liaño, condenado a 15 años de inhabilitación y apartado de la carrera por prevaricación, fue indultado en 2003 por el Ejecutivo de José María Aznar. En ese mismo indulto se liberó a otros 1.442 condenados, entre los que se encontraban miembros de Partido Socialista vinculados al caso Filesa.
'Chano' Rodríguez, del GRAPO a los Juegos Paralímpicos
Uno de las historias más llamativas es la del miembro del GRAPO Sebastián ‘Chano' Rodríguez, condenado a 84 años de cárcel por participar en varios atentados con explosivos en distintas ciudades españolas y por el asesinato del empresario andaluz Rafael Padura.
Estuvo 432 días en huelga de hambre, alternándola con estancias hospitalarias y la alimentación forzosa. Debido a dicha huelga quedó postrado en una silla de ruedas y el Gobierno decretó su libertad condicional en 1994. En 2007 fue finalmente indultado por el Ejecutivo de Zapatero.
Ahora es un laureado nadador paralímpico, con un palmarés de ocho medallas de oro, cuatro de plata y tres de bronce entre los Juegos Paralímpicos de Sydney 2000, Atenas 2004, Pekín 2008 y Londres 2012.
Caso Yak-42
Muy polémica fue la decisión del Gobierno de Mariano Rajoy en 2012 de indultar a los únicos condenados vivos por el caso Yak-42, los comandantes sanitarios José Ramón Ramírez García y Miguel Ángel Sáez García. Ambos fueron condenados a 18 meses de prisión, un año de inhabilitación especial y una multa de 900 euros por falsear la identidad de 30 de los 62 militares fallecidos en el accidente aéreo del 26 de mayo de 2003 en Trabzon (Turquía), cuando regresaban de Afganistán.
No debían entrar en prisión al recibir una condena inferior a los dos años, pero la inhabilitación especial provocaba su expulsión de las Fuerzas Armadas, que evitó el Ejecutivo del PP con su medida de gracia.
El banquero Alfredo Sáenz
En 2011, el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero aplicó el indulto a Alfredo Sáenz, entonces consejero delegado del Banco Santander. Condenado a tres meses de arresto e inhabilitación temporal por acusación y denuncia falsa, pena que si bien no implicaba su ingreso en prisión, sí que afectaba a su cargo por la normativa bancaria que inhabilitaba a las personas con antecedentes penales.
La medida de gracia permitió que Sáenz conservara su puesto en el banco, aunque en febrero de 2013 el Tribunal Supremo anuló el indulto al entender que el Ejecutivo no podía interceder en la normativa bancaria. Poco después, el Gobierno de Rajoy aprobó un real decreto que modificó los requisitos de la normativa bancaria, permitiendo así que no se inhabilitara a Alfredo Sáenz.
Torturas
El Ejecutivo de Mariano Rajoy se vio envuelto en 2012 en otra polémica tras conceder el indulto a cuatro Mossos d'Esquadra que habían sido acusados de torturas y lesiones tras detener a un hombre por error y amenazarle, golpearle e incluso meterle una pistola en la boca para hacerle confesar un robo en un piso que no había cometido.
La Audiencia Provincial de Barcelona se opuso a su liberación y decretó su entrada en prisión. Ante ello, el Consejo de Ministros anunció un nuevo indulto, comulgando la pena de dos años de prisión por multas de 7.200 euros.