Un juzgado de lo Contencioso de Palma ha condenado al Consell Insular por mantener a un trabajador durante cuatro años ejerciendo funciones de ingeniero de tecnología y a indemnizarle con la diferencia de sueldo por realizar funciones de un cargo superior al suyo.
La sentencia considera demostrado que este trabajador realizó el trabajo que correspondía a un puesto superior al suyo entre 2015 y 2019. La administración negaba que llevara a cabo esas funciones, sin embargo, la sentencia valora que el cargo de ingeniero había quedado vacante por un ascenso de su antecesor y que éste testificó en el juicio cuáles eran las tareas que se llevaban a cabo, que incluían la emisión de cierto tipo de informes.
Da la razón así al trabajador, representado en este procedimiento por el abogado Pablo Alonso de Caso. La consecuencia es que la administración tendrá que abonar en torno a 60.000 euros a su trabajador que es a lo que asciende la diferencia entre su trabajo nominal y el que hacía.
La administración suma condenas por su plantilla
Es la segunda sentencia en poco tiempo que afecta a la política laboral del Consell después de la que reconocía como indefinido no fijo a un trabajador interino que encadenó contratos de forma sucesiva durante más de una década.