Unos 130 coches participaron este domingo, según la Policía Nacional, en una marcha motorizada por las calles de Palma que partió del Camí de s'Escollera, frente a la Seu. Los manifestantes hicieron sonar los cláxones para criticar la temporalidad de los trabajadores públicos de la Administración.
Se celebraron movilizaciones con la misma intención en más de veinte ciudades españolas. De hecho, esta situación afecta a 800.000 trabajadores en todo el Estado, 20.000 de ellos en Baleares.
Algunas personas llevan 10, 20 o incluso 30 años trabajando como interinas para la Administración. Este último es el caso de una empleada de Justicia en Eivissa, que marca un hito. Muchos otros empleos temporales están en Educación y Sanidad.
USO o CGT se adhirieron a la manifestación. Los vehículos llevaban colgados globos amarillos y carteles reivindicativos, algunos con un número que expresaba la cantidad de años como trabajador temporal del propietario.
Carla Egea, portavoz de la Coordinadora de Temporales en Abuso de las Islas Baleares, criticó «lo que está haciendo el sector público, que no se le permite a la empresa privada».