El Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos (COAAT) de Mallorca visó el año pasado 2.345 nuevas viviendas en la isla, un 15,4 % menos respecto a 2019, por lo que, de esta manera, se rompe la tendencia al alza que se reanudó en 2014 tras superar la crisis.
De las obras visadas el año pasado en Mallorca, 993 fueron unifamiliares y 1.352 plurifamiliares, que son, en comparación a 2019, 249 y 178 menos respectivamente, según el informe del COAAT publicado este jueves sobre la actividad de la construcción en Mallorca en 2020.
El COAAT registró 993 visados de viviendas unifamiliares en Mallorca, de las cuales 626 fueron inmuebles aislados y 367, viviendas adosadas.
El presidente del COAAT en Mallorca, Daniel Tur, ha tildado «preocupante» este cambio de tendencia a lo largo de 2020, resultado de la crisis social y sanitaria debido a la pandemia, que no ha hecho «más que agravar» factores diferenciales de tipo estructural, como la escasez de suelo y de viviendas a precio asequible.
Por meses, septiembre y julio fueron en los que más visados de obra nueva se otorgaron en Mallorca, con 350 y 332 respectivamente, mientras que agosto y enero de 2020 fueron los meses con menos visados, con 106 y 127.
Por municipios, en Palma se registró el mayor número de visados en viviendas plurifamiliares, con 811, seguido de Son Servera e Inca, con 91 y 84 respectivamente. En unifamiliares, las viviendas visadas se concentraron en Palma, con 122 obras de este tipo visadas, Calvià, con 86, y Llucmajor, con 82.
En cuanto a los proyectos visados de nuevas edificaciones y reforma de establecimientos hoteleros, el COAAT visó en 2020 un hotel nuevo, que son 5 menos que el ejercicio anterior, antes de la pandemia. Por reformas y ampliaciones, se visaron otros 67 hoteles, un 30,9 % menos que en 2019.
Los visados de nuevos hoteles y reformas o ampliaciones en estos establecimientos turísticos registran una tendencia a la baja en Mallorca desde 2016, cuando se registraron 11 visados de nuevos hoteles y 152 para reformas.
Este informe también arroja que los principales indicadores de la actividad profesional de los aparejadores, como son las direcciones de obra, la redacción de estudios de seguridad y coordinaciones de seguridad en las obras a lo largo de 2020 no experimentan grandes variaciones respecto al ejercicio anterior.
En concreto, los aparejadores de Mallorca ejecutaron 3.145 direcciones de obra, 20 más que en 2019, y redactaron 586 estudios básicos de seguridad, 82 menos que el año anterior.
También redactaron 803 estudios de seguridad y salud, la cifra más elevada desde 2014, y coordinaron la seguridad de 2.122 obras, 27 más que en 2019.