Las organizaciones agrarias Asaja y Unió de Pagesos alertan del posible cierre del matadero de Palma el próximo 31 de diciembre si Cort no abona la ayuda pendiente que tiene con la concesionaria desde 2018.
La empresa adjudicataria, Escorxador i Serveis Càrnics Palma S.L., recibió una carta el 13 de diciembre de 2018 firmada por el entonces alcalde de Palma, Antoni Noguera, en la cual le confirmaba una ayuda de 150.000 euros prevista para el 2018. Noguera aseguraba que esta se efectuaría a comienzos de 2019 «de la forma más ágil posible». A día de hoy, asegura el responsable de la empresa concesionaria, Joan Pocoví, «no hemos recibido nada». «Nos encontramos en una situación insostenible», añadió este miércoles Pocoví a este periódico sin querer hacer más declaraciones.
Tanto Asaja como Unió de Pagesos alertan de que el cierre del matadero supondría liquidar el sector ganadero de la Isla, ya que el escorxador mata casi el 60 % del ganado de toda Mallorca y los otros degolladeros como el de Felanitx «no podrían asumir esta cantidad de animales», explica el gerente de Asaja, Joan Simonet. Ambas organizaciones agrarias recalcan que «no entienden cómo el Ajuntament de Palma atiende a otras empresas que ofrecen un servicio público e ignora de manera sistemática las necesidades del matadero».
Por su parte, desde Cort confirman que el Consistorio tenía un convenio con la explotación del matadero por cuatro años y que este expiró en 2017. Añaden que a raíz de un informe emitido por los técnicos municipales por ley no es posible otorgar dicha subvención, contradiciendo así la versión del entonces alcalde hace menos de un año.
Así pues, la responsabilidad del escorxador ubicado en Mercapalma parece estar en un ‘limbo' competencial entre administraciones públicas. El Ajuntament de Palma asegura que el matadero no es de su competencia después de la modificación de la ley de bases de régimen local de 2013 y, por su parte, la Conselleria d'Agricultura asegura también que no son de su competencia si bien le concede una ayuda pública a través del Fogaiba. En este caso, la de este año asciende a 167.000 euros pero todavía no se ha hecho efectiva. Desde Agricultura informaron este miércoles que se otorgará este mismo mes de noviembre. Pese a la ayuda del Fogaiba, el matadero de Palma tiene un déficit que rondaría los 300.000 euros que, de momento, solo la Conselleria d'Agricultura ayudaría a sufragar. «El matadero de Palma debe ser considerado como servicio público. ¿Que nos digan qué servicio público no es deficitario?», apuntaba ayer el secretario general de Unió de Pagesos, Sebastià Ordines.
El Ajuntament de Palma emitió este miércoles por la tarde un comunicado en que destacaba que trabaja junto al Govern para «encontrar una solución adecuada que permita desbloquear la situación». A su vez, recuerda que el 30 de diciembre de 2013 con la modificación de la ley de bases de régimen local el matadero dejó de ser competencia municipal.
No es la primera vez que el matadero de Palma está en al cuerda floja. En 2013 Escorxador i Serveis Càrnics asumió la concesión y cuatro años después ya alertó de la grave situación en que se encontraba al instalación cárnica. «La concesión del matadero se abrió a concurso cinco veces y siempre quedó desierto; tras las negociaciones del Govern, la actual concesionaria aceptó la gestión sin subir las tarifas a los ganaderos», recordó este miércoles Joan Simonet.
El gerente de Asaja apuesta porque la ley de capitalidad pueda sufragar el déficit que sufre el matadero «que da servicio a toda la Isla y es fundamental si no quieren aniquilar la actividad ganadera y las explotaciones de cereales que la sustentan».