Proyecto Hombre atiende diariamente a unas 523 personas en Baleares, siendo la cocaína la principal sustancia de consumo, con un 37,7 por ciento, seguida del alcohol (30,3 por ciento).
Así lo ha detallado en rueda de prensa este lunes el presidente ejecutivo de Proyecto Hombre Baleares, Jesús Mullor, quien ha recalcado que un total de 1.394 personas -así como a sus familiares- fueron atendidas en los programas y dispositivos terapéuticos de la entidad en 2017. De ellas, una de cada cinco era mujer.
El presidente ejecutivo ha explicado que la entidad ha celebrado su 30 aniversario (1987-2017) y ha subrayado que en total durante estos años de actividad han sido unos 30.462 usuarios atendidos -siendo 11.500 personas diferentes-.
Según los datos presentados, en 2017 el 12,7 por ciento de los pacientes fueron atendidos en los programas para jóvenes y adolescentes, un 24,7 por ciento en programas residenciales para adultos, un 26 por ciento en ambulatorios para adultos, un 16,4 por ciento en programas de reducción del daño y, por último, un 13,4 de los usuarios recibieron atención en programas penitenciarios.
La cocaína y el alcohol generan en conjunto las dos terceras partes de los ingresos. Además, la cocaína es la única sustancia que ha incrementado su peso en el conjunto de ingresos respecto a 2016 (4,4 puntos porcentuales más), mientras que el alcohol y la heroína se han mantenido en unos porcentajes prácticamente idénticos.
En cuanto al perfil del adicto, Mullor ha explicado que el promedio de edad en el momento del ingreso en 2017 fue de 36 años. «Detrás de los números hay personas con expectativas, ilusiones, sentimientos y frustraciones; los números no son fríos, son personas», ha expresado.
En relación a los programas de prevención, unas 7.128 personas -alumnos, familiares, mediadores sociales, técnicos de prevención laboral y trabajadores- participaron en los diferentes programas y talleres de prevención de Proyecto Hombre en 2017.
Asimismo, Mullor ha reiterado la importancia de la prevención, en especial en «el ámbito laboral». Además, también ha resaltado el «trabajo codo con codo con los centros de salud» y la importancia del «entorno familiar» del usuario.
El presidente ejecutivo también ha hecho hincapié en «la perspectiva de género» y ha dicho que «el 10 por ciento de los pacientes son madres con hijos», lo que supone una «dificultad añadida para iniciar un tratamiento».
Por otro lado, desde Proyecto Hombre Baleares han resaltado que el año anterior se puso en marcha el programa Ciber, dentro del área de Juventud de la entidad, con el objetivo de abordar de forma terapéutica los trastornos adictivos relacionados con las nuevas tecnologías (móviles, redes sociales, juegos, etc).
En este sentido, en total se han atendido durante este primer año de actividad a 28 personas. Actualmente, hay 14 jóvenes y adolescentes en tratamiento y un total de tres ya han conseguido el alta.
Proyecto Hombre Baleares celebró en agosto de 2017 su 30 aniversario, una celebración que, según han explicado, estuvo centrada en los valores como ejes vertebradores de la actividad y sentido de la entidad.
«Desde el inicio hasta ahora hemos cambiado muchas cosas, pero también hemos seguido una base y una filosofía común que gira en torno a los valores de transparencia, en creer en las posibilidades de la persona y la honestidad», ha expresado durante su intervención el presidente de las tres fundaciones de Proyecto Hombre Baleares, Bartomeu Català.