Las discotecas del molino d'en Carreres tienen los días contados, ya que el Ajuntament obligará a sus concesionarios a convertirlas en restaurante. Así lo anunció este lunes el teniente de alcalde de Urbanisme, Antoni Noguera, cuando presentó el Plan de Especial Protección (PEP) del Jonquet, que aprobará el Pacte la próxima semana.
El gerente de Urbanisme, Joan Riera, añadió que la concesión de las dos discotecas que alberga este molino finaliza en ocho años, aunque puntualizó que Cort podría obligar a que estos plazos se acorten «notablemente».
En este punto informó que ya han mantenido conversaciones con los concesionarios y aseguró que cuando acaben sus contratos están de acuerdo en reconvertirlos en restaurantes.
Problemas de ruido
El Pacte entiende que la reconversión de las discotecas en restaurantes permitirá mejorar los problemas de ruido que tienen los vecinos de la barriada. Noguera señaló que estas discotecas deben eliminar una de las dos plantas, ya que la segunda no está reglada.
Además, limitarán a tres el número de locales de restauración en 100 metros cuadrados, como se ha aprobado para los nuevos ejes cívicos.