Los ciudadanos de Baleares gastan una media de 1.511,8 euros al año por persona en alimentos, 29 euros más que la media que se sitúa en 1.482,3 euros, lo que supone la octava tasa más alta de España.
Así, según el último informe del Consumo de Alimentación en España publicado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente recogido por Europa Press, el consumo per cápita medio en el país asciende a 662 kilos por persona.
Los que más gastan en alimentos son, en concreto, los vascos con 1.830,3 euros; seguido de los catalanes con 1.743 euros; La Rioja con 1.674,8; Aragón con 1606,7; Asturias con 1.606,2; Navarra con 1.589,3; Castilla y León con 1.569,5; Baleares con 1511,8; Galicia con 1.513,3; Madrid con 1.502,3; Cantabria con 1.494,8; Valencia con 1418,5; Canarias con 1.338,5; Andalucía con 1.287,9; Murcia 1265,1; Extremadura con 1.252,8 y Castilla La Mancha con 1.248,6.
Canal preferido para la compra
Los hábitos de uso de los alimentos en el hogar revelan que se cocinan menús «más ligeros y sencillos», y que el «canal preferido para la compra» sigue siendo el supermercado, donde se realizan el 43 por ciento de las compras, pese a que «los productos frescos se siguen comprando en comercios especializados».
Una de las tendencias a la hora de hacer adquirir alimentos es realizar una compra «más responsable elaborando una lista antes de ir al supermercado», ya que casi el 72 por ciento de los españoles lleva a cabo este paso previo.
Además, el 75 por ciento de los españoles tiene en mente las promociones cuando hace la compra, mientras que el 24 por ciento es «infiel a su establecimiento habitual en función de la mejor oferta».
Por ello, la actividad promocional de marcas de fabricante se ha «intensificado notablemente en los últimos tiempos hasta el extremo» de que el año pasado el 28 por ciento de la venta total de productos de gran consumo se realizaron en promociones, mientras que la cuota de mercado de las marcas blancas o de distribuidor ya alcanza el 38 por ciento.
Compra por internet
Asimismo, «cada vez más los españoles compran por internet y se ofrecen nuevas modalidades», como el 'picking', que es «cuando te preparan los productos y los recoges los paquetes en el supermercado a una hora».
El comercio por internet supone en España «sólo» el 0,6 por ciento de las ventas totales del mercado pero el 35% de los consumidores declara que visitan las páginas web de las cadenas de distribución en busca de ofertas y promociones.
Además, una de las particularidades en España en relación a las comidas son los horarios ya que los españoles son «los que más tarde» comen de toda Europa.
Según la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (Seedo), «si España se ajustara su actual uso horario al británico para adaptarnos a las horas de luz naturales y mejorar la conciliación laboral y familiar también adelantaríamos nuestra hora de comer con lo que se ganaría en salud».
Al comer y cenar «tarde», se le «rompe el bioritmo al cuerpo» con lo que comer entre 13,45 y 14,30 horas y cenar entre las 20 horas y las 21 horas sería lo ideal, según la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD).