La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) de Mallorca considera que la consellera d'Educació, Núria Riera, «ha perdido toda credibilidad y ha dejado de ser una interlocutora válida, visto el interés particular que la mueve», tras la polémica dimisión del director de Educación, Miquel Deyà.
La entidad ha manifestado en un comunicado su preocupación por las «graves acusaciones» de Deyà, quien aseguró que renunció tras negarse a trasladar de Menorca a Mallorca a un docente afín al PP como le exigían la consellera y la directora del SOIB y candidata del PP a la alcaldía de Lloseta, Xisca Ramis.
Después de que Riera negara ayer haber pedido ninguna «irregularidad» y dijera que lo relatado por Deyà es «totalmente falso», FAPA Mallorca ha calificado la reacción de la consellera de «lamentable» por haberlo negado inicialmente y después haber admitido que solicitó una comisión de servicios para un profesor sin que estuviera justificada.
«Es lamentable que el poder y las lágrimas de la señora Riera tengan un destino tan interesada y poco loable como es el beneficio de algún 'enchufado' y no el bien común por lo que debería velar», ha criticado FAPA.
La entidad ha asegurado que lo ocurrido demuestra que la nueva consellera se limita a «aguantar» y «maquillar la situación con buenas palabras» hasta las próximas elecciones sin solucionar los problemas de la comunidad educativa.
«No era difícil mejorar las formas después de la experiencia de la anterior consellera pero el fondo es el mismo», ha comparado FAPA Mallorca.
La entidad ha puesto como ejemplo las incidencias recientes en infraestructuras como las de los colegios de es Molinar, la Soledat, el IES Politécnico, el CEIP de Lloret o el CEIP Miquel Duran i Saurina, donde «sólo se han parcheado los problemas y están pendientes de las verdaderas reformas».
FAPA Mallorca ha recordado que la Conselleria tampoco ha puesto solución tras la denuncia que formuló la entidad sobre un auxiliar técnico educativo del CEIP de Santa Maria, que golpeó a un alumno que tenía a su cargo, y sigue en el mismo centro «a pesar de las circunstancias que indican reiteración y la petición de traslado de toda la comunidad educativa y del propio trabajador».