La Autoridad Portuaria de Baleares ha decidido no iniciar las obras de dragado del puerto de Mahón tras haber recibido una orden de suspensión cautelar dictada por la Fiscalía.
Según han informado fuentes del ente que gestiona los puertos del Estado en Balears, el Fiscal Superior de las Illes Balears ha remitido un decreto en el que comunica la suspensión en la mayor urgencia posible del dragado de este puerto hasta que no se practiquen "determinadas diligencias de prueba por parte de la Fiscalía de Medio Ambiente".
La reacción de Autoridad Portuaria ha consistido en "no iniciar, de momento, los trabajos de dragado que fueron adjudicados a la empresa Sacyr".
Al mismo tiempo, ha iniciado el estudio de "la necesidad de limitar el acceso al puerto de Mahón de determinados buques en función de su calado por si la insuficiencia de este pudiera producir dificultades en las maniobras de atraque o desatraque de los barcos".
Estas dificultades se concentran "especialmente en la zona comprendida entre el Cós Nou y el muelle de pasajeros".
APB no ha descartado que "para esta próxima temporada deban suspenderse".
La decisión de Autoridad Portuaria se ha producido tras las movilizaciones de protesta y la recogida de más de 20.000 firmas a través de Internet.
Estas firmas han reclamado que no lleve a cabo el vertido en alta mar de los lodos y fangos que seran extraidos durante el dragado del puerto de Mahón.
Esta petición fue iniciada por Jordi Escandell en la plataforma de peticiones online Change.org.
Según este ciudadano, "Menorca, una isla declarada Reserva de la Biosfera de la Unesco, está en riesgo por un posible vertido masivo altamente tóxico: la Autoridad Portuaria de Mahón quiere arrojar frente a sus costas toneladas de fango contaminado con mercurio y otros metales pesados provenientes del dragado del puerto".
El 16 de marzo un centenar de personas se manifestaron frente a las oficinas de Autoridad Portuaria de Baleares en Mahón para expresar su desacuerdo con estos vertidos.
La entidad que gestiona los puertos del Estado en Baleares ha manifestado que las obras cuentan con "plenas garantías medioambientales", los informes a favor del Instituto Oceanográfico Español y también se ha pronunciado a favor la Cofradía de Pescadores de Mahón.