Por fin nevó en Palma. La ciudad amaneció espolvoreada de un manto de nieve que llegó a acumular más de cinco centímetros, un paisaje urbano inédito para muchos, y, por supuesto, poco habitual por estas latitudes. La temperatura no puede decirse que fuese extrema, -0,1 grado centrígrado a las 7.50 horas, según el dato del observatorio de la Agencia Estatal de Meteorologia situado en el puerto.
Lo más soprendente es que Palma estuvo con 1 grado hasta las doce del mediodía, circunstancia que permitió que buena parte de la nieve acumulada se conservase hasta las primeras horas de la tarde, cuando el termómetro se enfiló hasta los 4,5 grados en torno a las 16 horas. A partir de entonces la tempetaruta se desplomó en buena medida debido a los cielos despejados que hacían presagiar una noche gélida.
El viento, alrededor de 14 kilómetros a la hora, contribuyó a dar una mayor sensación de frío que, en absoluto, amendrentó a los ciudadanos que salieron a la calle dispuestos a fotografiar la estampa de una Palma con nieve en todos los rincones dispuesta a recibir la visita de grandes y pequeños, repitiendo el ritual de hacer el correspondiente muñeco y lanzarse bolas de nieve.
Quizá el aspecto más novedoso del temporal haya que buscarlo en las nuevas tecnologías. Desde primeras horas de la mañana comenzaron a circular por facebook, twitter y los teléfonos móviles miles de fotografías enviadas a los familiares, amigos y conocidos.
El que las temperaturas no descendiesen evitó que la nieve se helase y, en consecuencia, no se produjeron situaciones que frenasen las ganas de vivir en directo sensaciones que se producen muy de tanto en tanto en Palma. No obstante, fue evidente que el rigor climatológico restó tráfico rodado y peatones. Los comercios tampoco registraron una gran afluencia de visitantes, el frío no invitaba a mirar escaparates. Como siempre, los fumadores fueron los que sufrieron de manera estoica su dependencia del tabaco en plena calle, aunque fuera bajo la nieve. Lejos de las zonas urbanas el frío fue más extremo, la UIB bajó hasta los -1,4 grados a las 19 horas y el aeropuerto hasta -0,7 grados a las 20 horas.