El departamento de Hisenda del Consell de Mallorca ha hecho una transferencia de 900.000 euros a Radio i Televisió de Mallorca, que sigue activa a la espera de su liquidación definitiva, para que pueda pagar parte de la deuda que mantiene con su principal proveedor, las empresas audiovisuales.
Las principales asociaciones del sector, Aproba y Apaib, llevan meses dando la voz de alarma ante la situación del sector, tras el cese de las emisiones de [M] y Ona, además de los recortes de la televisión autonómica IB3, que ha dado un tijeretazo a la producción propia.
La deuda de [M] con las productoras, según el Consell, se aproxima a los 2,5 millones. Las asociaciones audiovisuales estaban decididas a iniciar movilizaciones.
El temor a la posible suspensión de pagos de Radio i Televisió de Mallorca y al embargo de bienes instada por Dragados y la mediación de los socialistas, que se reunieron con las productoras, ha agilizado la orden de transferencia.