La deuda que el Govern mantiene con los farmacéuticos de las Islas y que, a principios de este año alcanzaba los 55.138.248, 37 euros, continúa provocando malestar entre los profesionales y los titulares de las farmacias y ya está repercutiendo en el servicio que se da a los usuarios de la sanidad pública balear.
De hecho, empieza a haber problemas puntuales para conseguir fármacos caros o cuya venta es escasa porque hay falta de stock, aunque no de desabastecimiento de medicamentos.
Almacén
Los titulares de las farmacias más pequeñas, que son los que peor lo están pasando por los impagos del Govern, no pueden almacenar un gran stock de medicamentos, por lo que, en algunos casos, están optando por pedir sólo los fármacos que encargue el cliente y no tenerlos en la farmacia.
Este hecho provoca que el cliente, en algunos casos enfermos crónicos, tenga que ir hasta a cuatro farmacias distintas para conseguir uno de éstos fármacos con problemas de stock y que tenga que terminar por encargarlos y esperar hasta que la oficina de farmacia lo tenga, con el consiguiente trasiego que esto supone.
Así lo confirmaron ayer desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Balears (Cofib), manifestando que esperan que antes de fin de mes se produzca otro pago por parte del Ejecutivo autonómico para poder rebajar la deuda del Govern y dar un respiro al colectivo farmacéutico.
Pagos
El Govern ingresó el pasado día 30 de diciembre el 85% del dinero adeudado al colectivo farmacéutico. Un colectivo que ya ha anunciado que ha tenido que empezar a hacer despidos y que, en algunos casos, ha tenido que retrasar el pago de nóminas y pagas extraordinarias.
Desde el Colegio esperan que las promesas del Ejecutivo autonómico de ponerse al día en los pagos sea una realidad cuanto antes.