La petición del obispo de Mallorca, Jesús Murgui, de que se lea en todas las misas del próximo sábado y domingo la nota de la comisión permanente de la Conferencia Episcopal Española, que preside el cardenal Antonio María Rouco Varela, ante las próximas elecciones generales del 20-N, divide al clero mallorquín.
El texto de los obispos españoles trata de dar una orientación moral a los católicos ante su próxima cita con las urnas recordando que «las decisiones políticas han de ser morales y justas, no solamente consensuadas o eficaces». La nota alude al rechazo ante opciones que defienden el aborto o el matrimonio homosexual. Sin embargo, uno de los epígrafes más controvertidos hace referencia a la necesidad de «tutelar el bien común de la nación española en su conjunto, evitando los riesgos de manipulación de la verdad histórica y de la opinión pública por causa de pretensiones separatistas o ideológicas de cualquier clase».
Recomendación
Desde el Obispado se recuerda que «la lectura no es obligatoria, es sólo una recomendación. El texto se publicará en la Full Dominical , nosotros no hemos añadido ni quitado nada».
El deán de La Seu, Joan Bauzá, dijo que la lectura de la nota «se someterá a la decisión del Cabildo. Vamos a estudiar el modo de atender la petición del obispo. De un modo u otro le haremos caso, pero hay un problema en el idioma de la nota que se ha remitido».
Lo cierto es que la sugerencia de la lectura de las reflexiones de la Conferencia Episcopal ante el 20-N no ha causado indiferencia en el clero mallorquín, al que una parte significativa considera que se trata de una invasión en la conciencia política de los feligreses, sobre todo en aspecto que nada tienen que ver con la moral católica -como es el caso de la aspiración separatista- que deben defender los obispos.