El Govern ha hallado un documento del anterior Ejecutivo de Francesc Antich en el que se planteaba como una posible medida el cierre de Puntos de Atención Continuada (PAC) en el ámbito sanitario, si bien el portavoz, Rafael Bosch, ha recalcado que el presidente de la administración autonómica, José Ramón Bauzá, «ya ha dicho que no está contemplado el cierre de ningún centro sanitario, ni de ningún PAC».
Tras la reunión del Consell de Govern, Bosch ha firmado que en los próximos días, el Ejecutivo irá explicando el desarrollo del Plan de Estabilidad Económica y Financiera aprobado por el Ejecutivo central, mediante el cual se recortarán 380 millones de euros de gastos durante este año a través de distintas medidas, entre las que ha destacado la «racionalización energética, el recorte de subvenciones y la contención de gastos en todos los capítulos».
«Serán decisiones dolorosas pero la voluntad es ésta», ha aseverado Bosch, quien ha indicado que estos recortes se incluirán en distintas normativas, como la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos de 2012, si bien no ha descartado aprobar una Ley específica, que establezca los capítulos específicos en los que se disminuye el gasto, de cara a lograr un déficit máximo de 355 millones de euros, frente a los 575 millones que había a 30 de junio de este año.
En este sentido, ha considerado que sería «bueno» que hubiese un «cierto consenso» entre todos los grupos, respecto a las medidas de recorte que pretende llevar a cabo el Govern, teniendo en cuenta que, a su juicio, la oposición «tiene que asumir parte de la responsabilidad» que tiene de la actual situación económica, teniendo en cuenta que los socialistas «no hicieron los deberes que tenían que hacer, ya que a fecha 22 de mayo no vinieron los millones que debían de llegar de Madrid».
Venta de patrimonio público
Por otro lado, no ha descartado que el Ejecutivo de José Ramón Bauzá decida vender o subastar patrimonio público, tal como, según ha recordado, han hecho otras Comunidades Autónomas en determinados momentos económicos «adversos» en los que también han privatizado empresas públicas.
«No pasaría nada si en un momento dado se vende un patrimonio que no se utiliza, ya que no sería la primera vez que se hace», ha afirmado Bosch, quien ha destacado que el trabajo realizado hasta ahora por el equipo económico del Govern ha sido «muy claro e impecable» mediante un examen «exhaustivo» de la deuda y las facturas pendientes, de manera que ha negado que se haya computado «doblemente» la deuda y el déficit.
Por otra parte, el portavoz del Govern ha recordado que también se llevará a cabo un recorte de las subvenciones, que en su momento se otorgaron porque se consideraba que eran «importantes». Así, ha insistido en que, a partir de ahora, el Ejecutivo sólo gastará en lo que crea «realmente necesario para el funcionamiento de los servicios».
«Nos parece grave tener que aplicar estos recortes, pero una de las funciones de la política es tomar decisiones que en este caso son duras, si bien esperamos que estas supresiones sean provisionales y que volvamos a ser capaces de crear riqueza para volver a tener el mismo nivel de subvenciones y la capacidad de poder tener iniciativas nuevas», ha concluido Bosch.