Operación inversa en menos de cuatro meses y cada vez más rápida dado el entrenamiento. Las empresas concesionarias del mantenimiento de carreteras para el Consell de Mallorca sustituyeron esta madrugada 70 señales de limitación de velocidad, de 110 a nuevamenete 120 kilómetros por hora -mediante pegatinas- en las autopistas de la Isla.
La iniciativa de «ahorro energético» puesta en marcha por el Gobierno de España en marzo pasado concluyó ayer con una factura similar a la de entonces, es decir unos 3.500 euros al coste unitario de 50 por cada señal cambiada.
Rapidez
Los ejes principales donde es necesario cambiar los indicadores de velocidad máxima corresponden a la MA-13 o autopista de Inca, y la Llevant-Ponent que engloba las autopistas de Llucmajor, la de Andratx y la Vía de Cintura de Palma.
Los trabajos de cambio de contenido en los postes de señalización son considerados por adelantado desde el Consell como «rápidos y satisfactorios» al tratarse de una operación que ya meses atrás se resolvió «con diligencia por parte de las concesionarias y entonces no había una experiencia previa».
La vía desdoblada que une Palma con Manacor no está afectada por esta operación de cambio de señales ya que por las condiciones técnicas en las que está trazada, la de sus viales y separaciones, se trata de una carretera en cuyo trayecto la velocidad límite es de 100 kilómetros por hora.