Esquerra Unida de Balears ha afirmado que renunciará a continuar con una campaña electoral «normalizada» si se prohíben las concentraciones ciudadanas en varias ciudades españolas contra la gestión de la crisis y por una democracia real.
En un comunicado enviado ayer noche, el partido considera un «error jurídico y, sobre todo, político» los dictámenes de varias juntas electorales provinciales que ayer prohibieron las concentraciones, entre ellas la de Madrid, donde miles de personas acudieron a la puerta del Sol para protestar contra la crisis social y económica.
Entre las ciudades en que se están produciendo concentraciones está Palma, donde un centenar de personas ha dormido por segunda noche en la plaza de España.
En este sentido, EU espera que la Junta Electoral Central resuelva hoy favorablemente la impugnación presentada por el partido contra las citadas resoluciones.
«EU considera que una campaña electoral debe ser un momento de libre expresión de las ideas políticas, sin otra limitación que la utilización de métodos pacíficos», indica la formación en el comunicado.
El partido entiende que una campaña electoral donde solo los partidos tienen voz responde «a la visión acartonada de la democracia que el movimiento del 15 de Mayo pretende denunciar».
Además, remarca las coincidencias entre EU y este movimiento con respecto a la denuncia del bipartidismo y al peso de la banca y los mercados en la toma de decisiones políticas, «una verdadera dictadura de los mercados que tiene tanto que ver con la crisis económica y sus terribles consecuencias sociales en forma de desempleo y desprotección social».
Así, EU añade que ha acordado «no hacer una campaña electoral normalizada en un contexto de represión de este movimiento social» y ayer noche reunió su comisión electoral para tomar las decisiones oportunas sobre la orientación de las últimas 48 horas de campaña.
Por favor... Esto sí que es oportunismo y lo demás son cuentos. Si a EU no le gusta la ley electoral, pues a tener los votos suficientes para cambiarla y a quitar el día de reflexión. Mientras, a respetar las reglas del juego. No respetar la legalidad es no respetar la esencia del propio movimiento de "Democracia Real" (que ahora muchos partidos quieren hacerse suyo) y caer en una gran contradicción. La legalidad debe de ser para todos y tanto para bien como para mal.