El líder de la Lliga Regionalista de les Illes Balears, Jaume Font, propone suprimir 7.500 plazas de funcionarios de la Comunidad Autónoma en los próximos diez o doce años, con lo que pretende contribuir a un ahorro directo de unos 250 millones anuales.
Font sostiene que dejando sin cubrir el 70 por ciento de las vacantes por jubilación que se produzcan en la administración cada año se puede lograr reducir un 25 por ciento el número de funcionarios en aproximadamente una década.
El plan de ahorro en gastos de personal planteado por el candidato de la Lliga a la presidencia del Govern y del Consell de Mallorca se completaría con la eliminación de un tercio de los altos cargos existentes en la actualidad en las administraciones autonómicas, según ha expuesto en declaraciones a EFE.
«Esto no se puede hacer para el 2015, necesitamos diez o doce años para conseguirlo», ha recalcado el exconseller del PP, que calcula que al ahorro de 250 millones anuales que supondrán estas dos medidas habría que sumarle otros 100 millones de euros que es lo que estos funcionarios y altos cargos dejarían de gastar en instalaciones y material.
Font plantea estas iniciativas en el marco de un programa general de austeridad de las administraciones que pasa también por la supresión de «las duplicidades» entre los Consells y el Govern para optimizar los recursos y poder destinar los fondos públicos a las verdaderas prioridades de los ciudadanos.
La propuesta de la Lliga, que también quiere incentivar la movilidad geográfica de los funcionarios autonómicos, se basa en la idea de «dejar de hacer gasto superfluo» en un contexto de crisis.
El fundador del partido regionalista, que detallará mañana algunas de las propuestas de su programa electoral en un mitin que se celebrará en el Teatro Trui de Palma, ha criticado que algunos partidos planteen que van a generar trabajo y a cambiar el modelo económico desde el Govern sin aclarar cómo obtendrán los recursos.
«Lo mejor que podemos hacer es no estropear más las cosas para las empresas», ha incidido Font, para quien el modelo económico no se puede cambiar de la noche a la mañana, sino a través de una reestructuración profunda del modelo educativo, pero sí se pueden tomar medidas a corto plazo reformado la administración pública.
En este ámbito, rechaza una subida de impuestos y aboga por centralizar todas las ayudas a las empresas innovadoras en «un sólo organismo del Govern» para evitar la dispersión actual.
Otro de los planteamientos de la Lliga para incrementar los recursos públicos, más allá de la «imprescindible» mejora de la financiación que habrá que negociar con el Gobierno central, es revisar todas las concesiones públicas en materias como el tratamiento de basuras o la depuración de aguas.