El Colegio de Farmacéuticos de las Islas (Cofib) celebró, ayer noche, su cena anual para conmemorar la festividad de su patrona, la Inmaculada Concepción, y entregó sus insignias de oro y plata a los farmacéuticos que este año cumplen 50 y 20 años de colegiación.
Al acto, que contó con la participación y el ambiente de ediciones anteriores, y una amplia representación política con la presencia del delegado del Gobierno, Ramon Socias; el director general del IB-Salut, Josep Pomar y la directora general de Farmàcia, Rosa Maria Alís, también asistieron los presidentes de otras instituciones colegiales como Antoni Bennàssar, presidente del Colegio de Médicos, y Ramón García, presidente del Colegio de Veterinarios de Balears.
Crisis
El presidente de la institución colegial, Antoni Real, tras reconocer durante su intervención, que «el sector farmacéutico de las Islas vive uno de los momentos más tensos y difíciles de los últimos años» y que hay un importante malestar por parte del colectivo farmacéutico «por la mala financiación económica de nuestra Comunitat» recordó a todos los colegiados que, desde la junta de gobierno de la institución «hemos apostado por el diálogo con la administración, con coherencia y responsabilidad» y añadió que como colectivo «tenemos que ser capaces de actuar con valentía, pero, más allá de análisis precipitados y acciones individuales, es prioritario ser reflexivos y mantenernos todos unidos», en clara alusión a un grupo de farmacéuticos que han colgado carteles en sus farmacias contra la Conselleria de Salut.
Los farmacéuticos de las Islas están atravesando problemas económicos por la deuda del IB-Salut. Aunque tal y como reconoció Real «ya hemos cobrado unos 12 o 13 millones de euros» y esperan cobrar «unos 30 millones de euros más» durante el próximo mes.
«Estamos trabajando con las consellerias de Economia y Salut en la forma de regularizar el pago de la prestación farmacéutica a todas las oficinas de farmacia», apostilló Real.