El Govern de Balears ha decidido extender hasta los 40 años, la edad máxima para agogerse a la 'primera hipoteca', un producto del Govern y las entidades financieras para facilitar el acceso a la vivienda. Ayer se firmó, con representantes de las cajas y bancos, la segunda fase de esta promoción. El president Antich destacó que, desde 2008, 1.500 personas se han acogido a la 'primera hipoteca'.
El president explicó la creación de una modalidad complementaria para financiar al cien por cien las viviendas de protección pública así como la ampliación de la edad de los beneficiarios hasta los 40 años, mejoras que ha calificado de «sustanciales» y que han sido introducidas por el Govern con el objetivo de «incrementar el número de beneficiarios».
«De esta manera posibilitamos la opción de comprar una primera vivienda a personas que por su situación económica lo tienen menos fácil que otros», aseguró para anadir que este hecho mejora la confianza de la sociedad «a la vez que reactiva la economía» de las islas y crea ocupación en la construcción.
Buena relación
Antich dijo que con este producto financiero se promueve la concesión de hipotecas y se contribuye a reducir la cuantía de viviendas construidas y en venta existentes.
El presidente destacó la línea de colaboración entre el Govern y el sector financiero que supone este convenio y dijo que «hay que profundizar en esta relación» porque permite «generar más confianza en la sociedad ante la situación de dificultades económicas».
El conseller Jaume Carbonero, comentó que en la última parte de 2009 se ha apreciado «una aceleración» en la petición de hipotecas. De las 1.500 tramitadas, 906 se concedieron en 2008.
Según Carbonero, la 'primera hipoteca es «un producto muy necesario para muchas familias» y señaló que presenta las ventajas de que tiene mejores intereses, está avalada por el Govern y alcanza la totalidad del coste de la vivienda.