El presidente del Observatori Europeu de la Televisió Infantil, Valentí Gómez (Barcelona, 1947), expuso el pasado martes en el Parlament su análisis sobre la situación actual de la televisión infantil en España, tanto a nivel estatal como autonómico, y también en otros países.
Gómez, que también es filósofo y escritor, recordó que preside dicho observatorio desde 1997. «Cada año organizamos distintos seminarios y conferencias con especialistas de todo el mundo», señaló.
En su opinión, el actual panorama televisivo por lo que respecta a los espacios infantiles no sería necesariamente negativo, y puso como posibles ejemplos a seguir los programas que se están realizando en los países nórdicos y en estados como Australia, Nueva Zelanda, Brasil, Canadá, India o Reino Unido.
En España, la situación sería más compleja, ya que si bien Gómez valora de forma positiva la programación de algunos canales autonómicos, critica, en cambio, si bien con matices y por tanto no siempre, la televisión pública española y algunos canales privados, que, en su opinión, sólo tendrían como prioridad obtener beneficios sin reparar en los contenidos.
«Las empresas audiovisuales no han de preocuparse sólo de ganar dinero, pues tienen una responsabilidad social, ética y moral, la de dar una visión correcta de la realidad», destacó, para añadir: «Además, los niños y los jóvenes deben ser tratados como personas».
En este contexto, habló de la necesidad de que haya «pantallas sanas», es decir, que los niños «no sean consumidores pasivos de espacios televisivos, sino usuarios activos».
La responsabilidad para intentar hacer una televisión mejor sería no sólo de las empresas, sino también de los padres, los centros educativos, los medios de comunicación, las instituciones y la sociedad civil. Y, además, deberían ser también escuchados los niños y los jóvenes.
La televisión que Gómez defiende debería tener «contenidos éticos», para «formar, informar, educar y entretener». En este sentido, señaló que «cuando hablamos de contenidos éticos estamos haciendo referencia a qué valores queremos defender».
Preguntado sobre la autorregulación que años atrás aprobaron las cadenas privadas con respecto a los espacios infantiles, ironizó diciendo que «el ideal de la autorregulación estaría muy bien si se cumpliera antes la regulación ya existente, que determina cómo han de ser los contenidos entre las 06.00 y las 22.00 horas».
Para Gómez, incluso los actuales canales infantiles temáticos o especializados estarían siguiendo las mismas pautas «equivocadas» que las televisiones privadas. Por último, indicó que sería necesario contar en España con un consejo estatal de medios audiovisuales, consejo con el que ya cuentan algunas autonomías.