El president del Govern y secretario general del PSIB, Francesc Antich, aprovechará la 'relectura' del pacto que ha propuesto a todos los partidos que forman el Govern para poner sobre la mesa una cuestión muy concreta: si todos grupos que lo firmaron, consideran que aún está vigente.
Según ha sabido este periódico, habrá más de una reunión durante estos días y 'contactos bilaterales'. Para hoy mismo estaba prevista la primera de las reuniones entre Antich, Biel Barceló (Bloc) y Miquel Nadal (UM). La reunión se quiere mantener en secreto y no tiene confirmación oficial. De hecho, según el conseller de Presidència, Albert Moragues, «se celebrará después de la Semana Santa».
Francesc Antich, según la información facilitada a este diario, considera que el Govern funciona aunque, a veces, no se llega a transmitir todo lo que se hace. La posible remodelación del Gobierno central no variará, a la vista de los nombres que se barajan como ministro, la relación del Ejecutivo central con el de Balears. Sobre este asunto, Moragues, destacaba ayer el importante papel que, de confirmarse, jugaría Manuel Cháves, encargado de las relaciones con las comunidades autónomas.
Desde UM quieren que la reunión para reforzar el pacto sirva para revisar, uno por uno, todos los puntos del pacto para redefinir los aspectos más conflictivos del acuerdos.
Entre algunas reivindicaciones, los nacionalistas quieren que, cuando se confirme el incremento de la financiación para Balears, se aumente la partida de promoción turística. Esta es una aspiración que ha hecho pública Miquel Nadal, presidente de UM, en diversas ocasiones.
Aunque en UM no ocultan su malestar por la actual situación interna del pacto, los dirigentes nacionalistas son partidarios de mantener el actual acuerdo hasta que concluya la legislatura. Una vez que Antich no quiere convocar elecciones anticipadas y la moción de censura ha sido descartada por la propia Estaràs, la única salida pasa por aguantar hasta 2011.
Otra posibilidad, la cuestión de confianza, también fue descartada semanas atrás por la portavoz del Ejecutivo, Joana Barceló.
De hecho, esta reunión de partidos del Govern es lo más parecido a una moción de confianza, aunque fuera del ámbito parlamentario.
También Esquerra Unida (EU), que forma parte del Bloc, valoró ayer los contactos que se inician esta semana.
El coordinador de EU, David Abril, advirtió ayer que «esta reunión debe ser algo más que una simple foto». Su propuesta será «revisar las reglas de juego» ante lo que califica de «continuos desplantes por parte de UM».
También el PSM se pronunció ayer el secretario general, Biel Barceló, subrayó que el Govern debe ser decidido para cambiar el modelo territorial y de movilidad del archipiélago, en los términos en recogidos en el pacto de gobernabilidad.
Barceló señaló que ahora es el «momento decisivo» para que se adopten estas determinaciones y se ejecuten los proyectos sin que existan «trabas» por parte de los socios de Govern por «oportunismo político», en clara alusión a Unió Mallorquina, que plantea dudas y resquemores en relación a algunos de los proyectos ferroviarios.