El Puig Major ha podido salvar una de sus especies endémicas y única en el mundo: el turbit. En concreto, se trata de una planta de la familia del hinojo, que desde hace años es considerada una de las especies más amenazadas de la flora de Balears.
La conservación de esta especie ha sido posible gracias al trabajo de la Conselleria de Medi Ambient, entre otros. En concreto, han realizado diversas actuaciones sobre el terreno, entre las que destaca la protección física de algunas de las zonas en las que crece el túrbit para evitar que se lo coman las cabras de la zona. Esta actuación ha permitido que las plantas crezcan a buen ritmo.
Los propietarios de las fincas y los cazadores también colaboran en la protección de esta especie endémica, ya que intentan reducir el número de cabras de la zona más alta del Puig Major. Además, la base militar facilita el acceso a todos los que intervienen en esta tarea.