La diputada del PP y ex consellera de Salut, Aina Castillo, aseguró ayer en el Parlament que tiene informaciones que apuntan que la paralización de las obras de Son Espases tendrá un coste de un millón al mes. Castillo indicó que pagar el alquiler de la maquinaria y mantener el personal de las empresas que ejecutan el proyecto, obligarán al Ejecutivo a pagar dos millones de euros por dos meses de paralización. La información de Castillo no fue desmentida por el actual conseller de Salut, Vicenç Thomás, quien no despejó ningún interrogante sobre Son Espases y volvió a culpar al PP de la actual situación. En esta ocasión, sin embargo, Thomás tuvo que escuchar algunas recomendaciones de los grupos parlamentarios que apoyan al Govern. El portavoz de UM, Bartomeu Vicens, pidió al Ejecutivo que actúe con responsabilidad y exigió que no haya «una subasta de solares donde los ciudadanos puedan sugerir por internet nuevos solares para construir el hospital».
Durante su intervención, Castillo exigió responsabilidad al Govern, lamentó que la izquierda hubiese autorizado la construcción de viviendas con piscina junto a La Real y aseguró que no era propio de un gobierno responsable buscar nuevos solares. «¿Acaso en el nuevo solar no habrá destrucción del territorio?», preguntó Castillo.
El conseller Vicenç Thomàs lamentó haber heredado «una crispación social que antes no existía». «El PP ha roto el consenso», sostuvo Thomàs. En su segunda intervención, Castillo destacó que ninguno de los grupos políticos apoye la reforma de Son Dureta. «Ahora no están en la oposición. Están en el Govern», recordó Castillo.
En la réplica, el titular de Salut reiteró que el PP era el principal responsable de la actual situación. Thomàs no aclaró qué hará el Govern con el hospital de referencia e indicó que, en el caso hipotético de optar por Son Espases, se harán cambios en el proyecto que ya está en ejecución.
Desde el PSM, Biel Barceló no fue tan contundente en la tribuna de oradores a la hora de pedir al Govern que se detenga definitivamente el proyecto de Son Espases. Barceló también acusó al PP de haber roto el consenso.
Por otro lado, el Parlament rechazó ayer, con los votos del PSIB-PSOE, Bloc y UM, una Proposición No de Ley presentada por el PP, mediante la cual pedía a la Conselleria de Salud y Consumo que comenzase a vacunar a partir de 2008 a todas las adolescentes de las islas contra el virus de papiloma humano, con el fin de prevenir en un 70 por ciento el cáncer de cérvix o útero. La diputada del PP Aina Castillo recordó que Baleares es la primera Comunidad Autónoma con el mayor índice de cáncer de cérvix. El resto de grupos pidieron tiempo para tomar una decisión.