Bartomeu 'Tumy' Bestard se despidió ayer como agente consular de Estados Unidos en Balears tras 45 años de ejercicio en un acto de homenaje celebrado en el Consolat de la Mar que estuvo presidido por el president del Govern balear, Francesc Antich, y el embajador de Estados Unidos en España, Eduardo Aguirre, al que asistieron las máximas autoridades políticas de las Islas y una gran representación de la sociedad civil de la Comunitat, especialmente empresarial.
El embajador de EE UU en España, Eduardo Aguirre, destacó el «sabor agridulce» que le deja la despedida de Bestard y recalcó que el mallorquín se ha convertido en el decano de los agentes consulares en todo el mundo. Recordó que durante su trayectoria diplomática Bestard ha coincidido con ocho presidentes de EE UU, 18 embajadores y 15 cónsules generales en España. «Se ha convertido en toda una institución, el mejor amigo de Estados Unidos en Palma», afirmó el embajador, quien también destacó la «inquebrantable dedicación tanto a Estados Unidos como a España» de Tumy Bestard.
Tras su discurso, el embajador Aguirre entregó a Bestard la bandera estadounidense que ondeó en la embajada en Madrid el pasado 4 de julio, día de la independencia de ese país, con una inscripción en su honor. Tras la lectura de dos cartas remitidas por altos mandos de las Fuerzas Armadas Norteamericanas, el embajador procedió a entregar a Bestard la Medalla Excepcional de Servicio Público, otorgada por el Departamento de Defensa del Gobierno de EE UU, así como la bandera de agente consular.
A continuación tomó la palabra el president del Govern, Francesc Antich, quien destacó la capacidad de Bestard de «desenredar madejas burocráticas», al tiempo que alabó sus «espectaculares dotes de anfitrión en unas Islas en las que vivimos del turismo», afirmó.
Bestard pronunció un discurso más breve en el que agradeció la colaboración de los distintos embajadores y cargos del Gobierno norteamericano y también de las autoridades de Balears. «Sin ellos no habría podido hacer bien mi trabajo», dijo.
Al acto asistieron el delegado del Gobierno, Ramón Socías; la alcaldesa de Palma, Aina Calvo; el ex president Gabriel Cañellas; los ex alcaldes Ramón Aguiló, Joan Fageda y Catalina Cirer; el ex conseller Joan Flaquer; el presidente de la CAEB, Josep Oliver; el presidente del Fomento, Àlvaro Middelman; el presidente del Grup Serra, Pere A. Serra; los principales empresarios turísticos, Gabriel Escarrer, Miquel Fluxá y Gabriel Barceló; el presidente del Real Mallorca, Vicenç Grande; mandos militares y policiales, todo el cuerpo consular, directores de medios de comunicación, abogados y numerosos empresarios, así como el grupo Els Valldemossa, que se sumó al homenaje con sus canciones.