El fracaso escolar en la red de centros públicos de Balears fue del 37'3 por ciento durante el curso 2000-01, 11'1 puntos superior al fracaso registrado en la escuela concertada, donde la tasa alcanzó el 26'2 por ciento, según los primeros datos de fracaso escolar en las distintas redes educativas extraídos de la encuesta de Transición Educativo-Formativa y de Inserción Laboral (Etefil) 2005 publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Según los datos de Etefil 2005 analizados y publicados por la revista «Magisterio», Balears lideraba hace siete años, en el curso 2000-01, la tasa oficial de fracaso escolar en España con un 35'5 por ciento, siendo esta incidencia más acusada en la enseñanza pública, donde los índices eran del 37'3 por ciento, frente a las tasas de fracaso de la escuela concertada, donde era de 26'2 por ciento.
Así, hace siete años las islas registraban una tasa de fracaso escolar más de seis puntos superior a la tasa media de España, que era del 26'6 por ciento. A Balears, le seguían Murcia, con una tasa de fracaso escolar del 34'9 por ciento, y Extremadura, con un 34'0 por ciento.
En el conjunto de las comunidades la diferencia entre una red y otra es mucho mayor. A nivel nacional, la tasa de fracaso escolar en la escuela pública alcanza el 33 por ciento, un porcentaje que es más del doble del registrado en la concertada, que es del 13'9; mientras que en los centros privados el porcentaje es del 3'6 por ciento.
También a nivel estatal y por sexos, los varones fracasaron más en todas las redes, con un 41'7 por ciento de hombres y un 23'6 por ciento de las mujeres que fracasaron en la pública y con un 18'2 por ciento de los hombres y el 9'7 por ciento de las mujeres que lo hicieron en la concertada. Según la misma publicación profesional de la enseñanza y siguiendo con el curso de referencia, el fracaso en los alumnos de la escuela privada es del 5'6 por ciento en el caso de los varones, mientras que no cuenta con datos en el caso de las chicas.
Otro dato que recoge la encuesta indica que mientras que los alumnos cuyo padre no tiene titulación alguna fracasan en un 42%, sólo fracasan un 6% de los alumnos con padre licenciado.