Más de cien mil clientes de GESA en Mallorca se quedaron ayer a oscuras durante un lapso de tiempo de entre 30 minutos y seis horas como consecuencia de un incendio ocasionado en un transformador de la subestación de Valldurgent, situado en la carretera que une las localidades de Calvià y Puigpunyent, y que contenía 50.000 litros de aceite industrial.
El apagón, que comenzó a las 10.29 horas afectó a las localidades de Palma, Calvià, Puigpuyent, Andratx, Esporles y Banyalbufar, de forma desigual en su duración, aunque el municipio más afectado fue Calvià, que tardó cuatro horas en recuperar el suministro eléctrico. En Andratx, por ejemplo, decenas de usuarios seguían sin luz pasadas las siete de la tarde.
Tras declararse el incendio en la subestación de Valldurgent, por causas que GESA está investigando, y debido a las altas temperaturas registradas, los técnicos de la estación decidieron suprimir la electricidad de toda la planta, «para así facilitar el trabajo a los bomberos del Consell Insular de Mallorca y de Palma, y no poner en peligro sus vidas», según explicó la portavoz de GESA, María Frau. En el lugar de los hechos también se personaron efectivos de la Policía Local de Calvià, Protección Civil, Calvià 2000 y Guardia Civil.