L.TERRASA
Eduardo Gamero, hijo del director general de Promoción Turística del Govern, es piloto de Air Madrid y tripuló el último vuelo de la compañía rumbo a Latinoamérica. Poco antes de que se hiciera oficial la paralización de la actividad de Air Madrid, el vuelo rumbo a Santiago de Chile despegó de Madrid con solo una hora y media de retraso, casi nada comparado con los problemas de puntualidad que afectaban a la compañía desde hace meses.
A las 7.00 horas (horario de España), el avión tomó tierra en la capital chilena y no fue hasta entonces que tanto la tripulación como los pasajeros se enteraron de lo que pasaba y fueron conscientes de que habían tomado el último vuelo.
Eduardo Gamero aseguró ayer desde Santiago que «todos los miembros de la tripulación estamos tranquilos, aunque con la incertidumbre de no saber cuándo vamos a poder volver». Tampoco sabía este piloto mallorquín si el avión quedaría inmovilizado en el aeropuerto de Santiago. Gamero aseguró que «la compañía nos mantiene informados dentro de sus posibilidades y estamos tranquilos dentro de lo que cabe».
El viaje desde Madrid a Santiago de Chile transcurrió sin ningún incidente, pero los pasajeros con billete de regreso se encontrarán allí con que ya no podrán regresar con Air Madrid y tendrán que buscar una alternativa en otra compañía. Como Eduardo Gamero, en Air Madrid hay una treintena de pilotos mallorquines.