La Conselleria de Medi Ambient ha iniciado un programa de control de las poblaciones de estorninos y palomas en el casco urbano de Palma con la ubicación de cinco halcones en un nido artificial situado en el campanario de la Catedral, cuyo resultado definió ayer como un «éxito».
Medi Ambient informa que inició este proyecto en colaboración con el Obispado de Mallorca la pasada primavera.
La Conselleria contrató un equipo de especialistas de la empresa Falcó Control que apresaron cinco crías de halcón en nidos situados en distintos puntos de la Isla, para trasladarlos a al campanario de la Catedral.
Los halconeros alimentaron a las crías sin que existiera un contacto directo, para estimular su desarrollo natural.
Medi Ambient explica que «los halcones se han adaptado muy bien al nuevo hábitat y se han acostumbrado a cazar sobre la ciudad y los alrededores, sin alejarse apenas del casco urbano».
La Conselleria añade que es habitual ver por las tardes a los rapaces cazar a los estorninos que se acercan a Palma. «Esta semana uno de los halcones fue localizado en el aeropuerto, donde pudo ser capturado temporalmente, para completar su anillamiento y verificar su estado físico, que es óptimo», puntualizan.
El ave fue puesto otra vez en libertad por el conseller de Medi Ambient, Jaume Font.