La puesta en marcha del cable y del gasoducto en Balears no tendrán un impacto ambiental significativo en Balears y permitirán dejar de emitir a la atmósfera de 23 millones de toneladas de C02, una cantidad importante para la lucha contra el «efecto invernadero». El conseller d'Indústria, Josep Juan Cardona, presentó ayer la Evaluación Ambiental Estratégica sobre Balears que ha realizado el Laboratorio de Modelización Ambiental, la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Industrial de Barcelona y la Universitat Politècnica de Catalunya.
Dicho estudio concluye que en el año 2015, con el conjunto de las actuaciones relacionadas con el Plan de Eficiencia Energética, el Plan de Impulso de las Energías Renovables y las actuaciones previstas en la generación se deberán dejar de emitir hacia la atmósfera un total acumulado de 23,4 millones de tonaladas de gases de efecto invernadero.
El estudio sostiene que el cable, el gasoducto, el polioducto de Menorca y el olioducto de Eivissa son infraestructuras que no tendrán impactos significativos sobre el medio. El informe de evaluación indica que la construcción, el montaje y la posterior operación del gasoducto y del cable, tanto en los tramos submarinos como en los terrestres, así como las actuaciones complementarias en Eivissa y Menorca, tienen «una limitada capacidad para producir impactos de tipo permanente e irreversible». «No se prevén efectos especialmente significativos para el medio ambiente ni la construcción, ni en la operación de estas infraestructuras», dice el estudio. Sin embargo, la documentación presentada ayer por Josep Juan Cardona reconoce que existe la posibilidad de que se generen ruidos y movimientos de fondos marinos debido a la presencia de barcos que harán el trazado submarino. Entre otros inconvenientes, el estudio plantea también que podrían causarse posibles repercusiones de corta duración en la calidad del agua, así como el ruido y tráfico denso de vehículos y maquinaria durante el tiempo que se construya el gasoducto. Entre algunas de las ventajas citadas por Josep Juan Cardona se destaca que el gasoducto evitará, por ejemplo, el tránsito diario de camiones que transportan combustible de Alcúdia hasta una central eléctrica. «El informe no es preceptivo, pero será de obligado cumplimiento», dijo.