La Fundació Aeronàutica Mallorquina cumplirá dos años en enero y los objetivos propuestos en su acta inicial comienzan a cumplirse, gracias al apoyo del Consell Insular de Mallorca, que confía en esta propuesta por su fondo y su forma, únicos y originales en su género. La presidencia de Fernando Piña y la vicepresidencia de Miguel Buades ultiman los detalles para organizar el legado de Ramón Rullán junto a los proyectos más urgentes para poner en marcha.
Por una parte, la restauración del último «Coronado» de Spantax, que se convertirá en aula del conocimiento y, por otro, y dentro del programa de divulgación y enseñanza, hacer llegar a los escolares de nuestra Isla las ciencias que explican los aspectos básicos del vuelo y los estudios aeronáuticos. Miguel Buades piensa que «un buen conocimiento de este mundo puede ser una base para que nuestros escolares puedan conocer, de una manera didáctica y divertida, todo lo que rodea a la aviación», e insiste en señalar que «este año se ha preparado un programa especialmente dedicado a los alumnos de ESO, ya que están en la edad ideal para entender y asimilar los diferentes conocimientos técnicos».
«Se pretende englobar este temario como complemento a las actividades de la asignatura de Física, y para que los incentivos sean mayores aún, se realizarán dos bautismos del aire con la colaboración de las escuelas de pilotos que operan en Son Bonet», añade. Buades puntualiza la necesidad de cumplir con la normativa vigente de Aviación Civil, con un programa debidamente ajustado a la normativa de seguridad.
Oscar Pipkin