w La nueva temporada que está a punto de estrenarse se presenta nostálgica y con muchas propuestas, aunque sólo algunas destacan como claras triunfadoras. La clave para tener un armario a la última este otoño pasa por los años 50, con los talles altos, las faldas con vuelo, las chaquetas entalladas y mucho glamour. Además, se recuperan todos los tejidos y materiales característicos del invierno, como la pañería inglesa, el punto y las pieles.
w Todas las colecciones presentadas para este otoño-invierno desde París hasta Nueva York, comparadas en Londres, Milán o Madrid, lo han puesto de manifiesto. La mayoría de los diseñadores exigimos y reivindicamos la vuelta inmediata de la mujer a su esencia más pura o, lo que es lo mismo, a la femineidad con mayúsculas. Una femineidad que puede incluso rozar la cursilería. ¿Y qué? Si las mejores marcas de moda alardean de ello, por algo será.
w La nueva «working girl» ya no se disfraza de hombre sino todo lo contrario, derrocha sensualidad y seguridad en sí misma. De entre todas las tendencias que vienen hay que destacar el liderazgo de la lana y el retorno a los 50. La primera se convierte en indiscutible protagonista de este invierno por ser la materia prima de dos de las propuestas más secundadas por los diseñadores: el «tweed» y el punto. Ambas tendencias se engloban dentro de una estética muy retro que alcanza su clímax recuperando dos clásicos de aquella década, como son las pieles y los estampados de leopardo. Este popurrí de tejidos y estampados da forma a las prendas más caprichosas de la nueva temporada, donde las blazer entalladísimas, los pantalones Capri y las estolas de piel cotizan al alza.
w Seguirles la pista no va a ser nada complicado; eso sí, el momento de comprar es ahora porque cada vez hay más empresas que lanzan colecciones muy limitadas que se agotan muy seguidas y no se reponen, como es el caso de Zara. Para seguir la moda a pies juntillas la opción, al alcance de una minoría, es Chanel, Prada, Bluemarine... Para interpretarla no hace falta arruinarse, basta con acercarse a Zara, El Corte Inglés, Massimo Dutti e innumerables tiendas que ofrecen las tendencias de la alta costura a precios muy accesibles.
Marily Coll