La Conselleria de Medi Ambient podrá autorizar la perforación de unos 750 pozos en el suelo rústico de Mallorca para el suministro de viviendas unifamiliares.
Ése es el margen que concede un informe elaborado por técnicos de la propia Conselleria sobre las posibilidades de extracción de agua subterránea sin vulnerar las condiciones y las limitaciones del Pla Hidrològic Balear respecto al aprovechamiento y explotación de los acuíferos.
El número de pozos que se pueden autorizar es, en realidad, una referencia, pues su concreción dependerá del volumen de agua extraído. Se considera que, con una extracción media de 200 metros cúbicos anuales, se podrían autorizar esos 750 pozos, lo que supondría un aprovechamiento global de 150.000 metros cúbicos, una cantidad, que en el conjunto del consumo de agua en Mallorca, sería relativamente baja, un 0'1 por ciento del total.
El conseller de Medi Ambient, Jaume Font, explicó que «no se concederá la perforación de un pozo a aquellas viviendas que no cuenten con una cédula de habitabilidad o, al menos, con una certificación del ayuntamiento correspondiente que acredite el carácter residencial de esa edificación. Habrá que instalar contadores y la Conselleria realizará inspecciones para comprobar si las extracciones se ajustan a las cantidades asignadas».
Como se recordará, el actual Govern levantó la moratoria de pozos vigente durante el Pacte de Progrés, que afectaba a 15 de los 21 acuíferos de Mallorca. El levantamiento de esa moratoria permite a las viviendas en suelo rústico extracciones de medio litro por segundo o 200 metros cúbicos anuales. En algunas zonas, la permisividad se amplía a un litro por segundo y oscilaciones de entre mil y tres mil metros cúbicos anuales. Asimismo, es obligatorio cimentar los pozos para evitar filtraciones contaminantes.
Cabe destacar también que la Conselleria de Medi Ambient ha autorizado la extracción de otros dos hectómetros cúbicos anuales de agua (dos millones de metros cúbicos) para uso agrícola en Mallorca, siempre que el aprovechamiento de recursos hídricos con este fin esté debidamente justificado.
Asimismo, el conseller se refirió a la modificación del proyecto de la arteria Llubí-Crestatx-Pollença. Font tiene la determinación de que la conducción no llegue a Crestatx para impedir impactos ambientales y no dar oportunidad de explotar los recursos hídricos de ses Fonts Ufanes. Así, indica que «el Govern del PP apuesta por preservar los acuíferos y no tocar ses Fonts Ufanes para nada. Nuestra intención es conducir la arteria hacia la Font de Sant Joan para enlazar con la futura desaladora de Alcúdia».