La afluencia a los comercios que abrieron ayer en Palma, sobre todo en el centro, fue notable y durante toda la jornada fue continuo el trasiego de personas por las calles de la ciudad.
El sol se convirtió en uno de los mejores aliados del primer día del «puente» y los establecimientos que abrieron sus puertas estuvieron muy concurridos.
La mayoría de los establecimientos que abrieron sus puertas por la mañana, también lo hicieron por la tarde, sobre todo en la zona más comercial de Palma, Jaume III y Avingudes, estimulados por la apertura de las grandes superficies.
El de ayer, y eso se notó en la calle, fue el primer día que se dedicó a la compra de regalos para las inminentes fiestas.
Y más que a comprar, a mirar y a elegir posibles regalos. Aunque casi siempre se planea espaciar las compras, finalmente se termina dejándolo para el último día.
Las grandes superficies estuvieron bastante concurridas pero lejos de la imagen de los días previos a Navidad o a Reyes.
La calle Jaume III y es Born fueron a lo largo de la mañana un ir y venir de gente mirando escaparates o planeando regalos. Esta zona contaba ayer con el añadido de los puestos de la Feria de las Entidades -que ayer se clausuraba- y las instalaciones infantiles. Como también había música y el sol acompañaba, la tranquilidad marcó la jornada.Ayer casi se pudo comprar de todo, sobre todo en el centro. Los estancos no abrieron, pese a que sí lo hacen los sábados no festivos.
Los comerciantes hicieron, en este sentido, uso de su libertad. Unos abrieron y otros no y así era posible ver establecimientos abiertos y otros con la verja cerrada. El próximo lunes (festivo) las tiendas estarán cerradas.