A cambio, el Govern debería firmar convenios con cada uno de los muncipios de Balears para compensar la falta de ingresos de los ayuntamientos por la reducción de estos impuestos. El departamento que dirige Cabrer también estudiará la repercusión que tiene en el precio final de la vivienda el coste del suelo y los materiales. En cambio, el Ejecutivo descarta reducir el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, que subió del 6 al 7 por ciento en el año 2000. El Govern también espera que los ayuntamientos colaboren en facilitar suelo para conseguir el abaratamiento de la vivienda. La consellera d'Obres Públiques, que entregó junto al president Matas las llaves de 23 viviendas en el barrio palmesano de Secar de la Real, anunció que a principios del mes de enero su departamento presentará un plan de la vivienda con el objetivo de reducir los precios inmobiliarios en Balears. Cabrer descartó que dicho plan pueda incluir una penalización fiscal para todos aquellos propietarios de pisos desocupados. «Nosotros no aumentaremos los impuestos», aclaró la consellera Cabrer.
El plan que prepara el Govern tendrá como principal objetivo facilitar el acceso a la vivienda de los jóvenes de Balears, pero Cabrer subrayó que las medidas pretenden favorecer a todos los colectivos sociales. La consellera d'Obres Públiques recordó que el precio de la vivienda en Balears se ha duplicado en sólo cuatro años y calificó de «injusta» la situación que padecen los ciudadanos de Balears, especialmente el colectivo de los jóvenes. La consellera también aclaró que el futuro plan de la vivienda contemplará la construcción de más hogares subvencionados y que perseguirá la salida al mercado de inmuebles que ahora están vacíos. Cabrer es partidaria de ayudar a los jóvenes para que puedan pagar la entrada en caso de que estos aspiren a adquirir un piso o dar subvenciones para el alquiler de viviendas. «Hemos de conseguir un control sobre el precio de las viviendas», recalcó Mabel Cabrer.
Precisamente, la titular de la Conselleria d'Obres Públiques mostró su satisfacción por entregar las llaves de 23 viviendas en Secar de la Real, una promoción que ha tenido un coste de 1'23 millones de euros. Se trata de la primera vez que el Govern entrega esta legislatura las llaves de una promoción de viviendas de protección oficial. Las viviendas forman parte de bloques de dos plantas, que se adaptan perfectamente al entorno urbano del Secar de la Real. Situadas en la avenida del Císter, las viviendas entregadas ayer por el Govern constan de tres habitaciones y los nuevos propietarios tienen la posibilidad de adquirir también un párking. El precio de la vivienda asciende a 144.000 euros (21 millones de pesetas) y el párking cuesta 12.000 euros.