La culminación de muchos años de trabajo. En los campamentos de refugiados del Sáhara, un grupo de mallorquines empieza a ver los frutos de su trabajo en la zona. Desde septiembre de 2002, el programa de prevención en la salud infantil denominado «Nin sa», destinado a niños de entre 0 y 3 años, ha empezado a rodar sólo tras un largo período de preparación tanto de los enfermeros como de la población y sus instituciones. El programa nació desde la Associació Amics del Poble Sahrauí de les Balears y cuenta con la ayuda del Fons Mallorquí de Solidaritat i Cooperació.
Los frutos empiezan a recogerse ahora. La pasada semana, Rosa Canyelles regresó por tercera vez a los campamentos para ver cómo se desarrollaba el programa. «Mi función ha consistido en observar si los problemas se habían solucionado y si necesitaban algún material», aseguró. El programa se inició con un primer viaje de formación. «Era necesario realizar una educación sanitaria». Los jefes de barrio, las asociaciones de mujeres y diferentes agentes de la sociedad, además de los futuros enfermeros, asistieron a estas primeras reuniones. Más tarde se formalizó la cartilla sanitaria y se realizaron talleres prácticos destinados en exclusiva a los enfermeros y a los auxiliares en los que se enseñaba cómo funcionaban instrumentos como, por ejemplo, las básculas pesabebés.
Desde septiembre de 2002, los enfermeros se dedican a realizar las historias clínicas y a rellenar las cartillas. Una información que sirve para conocer de dónde procede una determinada enfermedad y que ayuda a los enfermeros y médicos que acuden al Sáhara desde Mallorca a tratarla, sobre todo aquellas que se consideran peligrosas para la salud del niño. En la cartilla se recogen los siguientes datos: los antecedentes familiares, el nacimiento, la exploración del recién nacido, las vacunas, el peso, la talla, el perímetro craneal, el desarrollo psicomotor, las incidencias y alguna recomendaciones para las madres.
Laura Moyà