El presidente del Govern, Francesc Antich, reivindicó ayer en Barcelona que Catalunya y Balears «quieren una Europa en la cual los pueblos estén representados por igual y que puedan ser escuchados por igual». Antich realizó esta reivindicación durante su intervención en la II Jornada Illes Balears y Catalunya de la Unión Europea, que tuvo lugar en Barcelona, y que también contó con la participación de Jordi Pujol.
Antich considera urgente que «las regiones tengamos voz propia y directa en el Consell de la Unión Europea». «Comparto con el president Pujol de que es tan importante la fortaleza de nuestros respectivos países como la proyección exterior que nos quieran dar», dijo Antich, quien se reunió durante más de media hora con el presidente catalán en el Palau de la Generalitat. Se da la circunstancia de que Antich planteó hace unos días que Balears debería contar con un departamento de asuntos exteriores, aunque dichas competencias sean de ámbito nacional.
Por este motivo, Antich rechaza «una Europa homogénea, y apostamos por una Europa plural y diversa, construida desde la proximidad y más participativa». Según Antich, la perversión política del Estado de las autonomías puede significar una traba para participar en los órganos de la UE.