Tras haber realizado una nueva hazaña a «lomos» de su moto acuática, Àlvaro de Marichalar regresó ayer a Palma para agradecer personalmente su apoyo a todas las personas que le han ayudado a realizar la travesía Atlantik 2002.
Han sido 65 días y 64 noches de navegación, durante los cuales ha recorrido unos 18.000 kilómetros y ha pasado por 16 países, parando en 60 puertos de mar. Àlvaro bebía aproximadamente, a diario, 12 litros de agua, para evitar la deshidratación y las altas temperaturas en el mar, comía 5 veces al día y ha perdido sólo 3 kilos de peso.
Su aspecto ayer era el de un hombre satisfecho que, con una experiencia de 20 años en el mundo de la navegación, ha logrado uno de sus mayores sueños. Durante este tiempo ha conquistado 7 récords mundiales. Sus aventuras siempre llevan el lema de «Paz, tolerancia y libertad», lucha en contra de las drogas y por allí donde pasa ondea las banderas de distintos países. En esta ocasión la bandera mallorquina junto a otras como la de Argelia, ondearon frente a la Estatua de la Libertad tras llegar al final de la travesía en Nueva York.